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Alberto Ávila es un atleta paralímpico que compite en 400 metros y al que siempre veremos en las redes sociales bromeando sobre su discapacidad. Gracias a su sentido del humor y lo que llamarían algunos hoy en día “humor negro”, cuando era pequeño en vez de sentir complejo fue aceptado por todos los niños de su clase. Ávila tiene 23 años y nació sin el peroné derecho pero, como recalca en esta entrevista que concedió al diario deportivo MARCA, “ha sido siempre el primero en hacer bromas al respecto de su discapacidad”.
Alberto Ávila le gastaba esas bromas a sus compañeros y profesores: “hasta me inventaba historias de todo tipo cuando me preguntaban qué me había pasado. Le echaba mucha imaginación, siempre tratando de no ofender a nadie, claro. He contado desde que me pilló un toro a que metí la pierna en las vías del tren o que me la comió un tiburón”.
Ávila ha destacado que fue clave la educación de sus padres
Alberto Ávila, entre otros aspectos ha destacado que “su forma de educarme ha sido clave”. Por ejemplo, "cuando íbamos al pueblo en verano, que como en todos los pueblos se suele hablar un poco de más, nunca intentaron esconderme. Me llevaban por la calle en pantalón corto. Hay que llevarlo de la mejor forma posible”. Cuando era pequeño afirma que donde peor lo pasaba era en la playa porque de pequeño todo el mundo le miraba.
El sentido del humor viene de familia: Ávila narra una anécdota que le ocurrió cuando tenía ocho años: “Un día, cuando tenía 8 años, estaba jugando al pilla pilla con un amigo en la urbanización que vive de Coslada (Madrid). De repente, su amigo se dio cuenta de que Alberto había perdido el dedo gordo del pie. Y se pusieron a buscarlo. "Y yo me puse a gritar: '¡Se me ha roto el dedo del pie! Y mi madre dijo: ¿De la pierna buena o de la mala?”.
Provoca risas a través de TikTok
Alberto Ávila es un habilidoso “TikToker”. Desde su perfil en esta red social provoca muchas risas a sus más de 73.000 seguidores. A lo largo de su cuenta, Alberto Ávila ha bateado con su prótesis, jugado al golf con ella, pescar como si fuese una caña o preguntar a la gente cómo perder dos kilos rápido y acto seguido quitarse la prótesis y pesarse.
Comenzó a practicar atletismo en 2015
Este madrileño de 23 años no ha dejado de practicar deporte cuando era pequeño, siempre ha hecho lo que ha querido: jugar al fútbol, practicar natación o atletismo, deporte que practica desde hace cinco años: “El deporte ha sido siempre lo que más me ha gustado y mis padres, desde pequeño, me han incitado a hacerlo. Aprendí a montar en bici con cuatro años, hacíamos rutas por la montaña, a veces de hasta 20 kilómetros, y me trataban como a un niño más. El deporte me ha fortalecido siempre mucho”.
De hecho, en 2015 comenzó a entrenar en Majadahonda y ahora lo hace en el CAR de Madrid de lunes a viernes. Ha batido los récords nacionales de 60, 100, 200 y 400 metros de su categoría (T64), se ha proclamado campeón de España de 100 y 200 y campeón de Europa sub 20 en ambas distancias.
Su máximo objetivo es Tokio 2021
El COVID-19 ha retrasado uno de los máximos objetivos de Alberto Ávila, los Juegos Paraliímpicos de Tokio 2020, que se disputarán el próximo verano. Ávila asegura que “estará preparando la base para clasificarse hasta septiembre” y en 2021 empezará a competir para lograr el objetivo.
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