22/08/2019 - 09:13
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Un bebé de apenas dos meses y con signos de haber sufrido malos tratos, se encuentra ingresado grave en la UCI del hospital de Lugo. Sus padres, sobre los que pesan las sospechas, fueron detenidos ayer.
La vivienda en la que residía era insalubre y varios operarios han sacado basura acumulada
La alarma de malos tratos la dieron los propios sanitarios. Fuentes de la investigación han informado que se pidió una orden de acceso a la vivienda que habitaba esta familia.
Una vez allí, quedó constatada la insalubridad de ese hogar. Se requirió la presencia de operarios de limpieza para retirar toda la basura acumulada.
Los servicios sociales de la Xunta han asumido la tutela del menor
El delegado de la Xunta en Lugo, José Manuel Balseiro, ha explicado que de forma "inmediata" se pusieron en marcha "los protocolos de protección del menor.
Los padres del bebé, tras ser detenidos el lunes, han comparecido ante la titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, Pilar de Lara. Quien los ha dejado en libertad en la noche de este martes investigados por un supuesto delito de maltrato a menores.
La Xunta de Galicia ha asumido la tutela urgente, por lo que en las próximas horas determinarán las siguientes medidas a tomar.
Retiran una tonelada y media de basura de la casa
Los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Lugo han retirado alrededor de una tonelada y media de basura de la vivienda de los investigados por el presunto maltrato a su bebé de dos meses.
Vivienda que también ha tenido que ser "desratizada y desinfectada", ha confirmado el consistorio de la ciudad gallega.
El concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Lugo, Álvaro Santos, que ha calificado la situación de "dramática y de gran magnitud". Ha explicado que los servicios de limpieza han tenido que retirar "alrededor de tonelada y media de basura" del hogar en el que residía el bebé. "Tenemos que garantizar la salubridad y la seguridad pública de los ciudadanos", ha dicho el edil.
Quedó constatada la insalubridad de ese hogar, a causa de un "olor nauseabundo".
Agentes de la Policía Local vestidos con monos, calzas y mascarillas permanecieron durante horas en el número 23 de la calle Hermanos Carro
En el lugar también trabajaron varios operarios del servicio de limpieza Urbaser, que tuvieron que hacer uso de varios vehículos para retirar toda la basura acumulada.
De la vivienda sacaron numerosas bolsas de basura. Además, en las labores de limpieza hizo falta un camión grande. Desde la propia ventana de la casa, los operarios arrojaron colchones en muy mal estado, somieres oxidados y restos de mobiliario totalmente deteriorado.
Tal era la cantidad de restos que los operarios no descartaban que hubiera algún animal muerto en alguna de las habitaciones de la casa.
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