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La entrevista probablemente es una de las fases más difíciles antes de llegar a conseguir un trabajo. El seleccionado ha tenido que pasar en el mejor de los casos una prueba de selección de la que Recursos Humanos se nutrirá para hacer una criba entre los finalistas. Por ello, la entrevista suele ser la última parte antes de incorporarte a tu futuro puesto de trabajo.
Para llegar a la fase de la entrevista, debemos preparárnosla como si fuera un examen: conocer el ámbito en el que se mueve la empresa (ejemplos: alimentación, automoción o publicidad), aunque también deberemos prepararnos personalmente.
Los entrevistadores se basan en las primeras impresiones
Debes empezar las entrevistas con buen pie, ya que los departamentos de reclutamiento se basan en primeras impresiones. Ahora más que nunca ya que, los entrevistados se encuentran en su casa ante la imposibilidad de realizar una entrevista de manera presencial.
Además de preparar de manera natural algunos datos sobre la empresa para la que estás haciendo la entrevista debes estar correctamente vestido. No, un chándal por mucho que estés en casa no es una buena vestimenta. Camisa y americana para afrontar la entrevista y para no dejar un punto a contraluz, deberás afrontar la entrevista en un lugar luminoso. Esto también es necesario ensayarlo.
Durante la entrevista, la persona que está realizando esta fase contigo va a querer saber más sobre su futuro compañero o trabajador, pues, aunque tenga tu currículum delante quiere que le expliques qué te llevó a tomar el camino para llegar hasta ahí. Normalmente, el departamento de Recursos Humanos te pregunta por tus experiencias pasadas, sobre todo, si no tiene nada que ver con el sector que desempeñarás en un futuro.
El trabajo en equipo es una de las herramientas que te hará mejor complemento
También querrán ver de primera mano cómo te desenvuelves para trabajar en equipo. El trabajo en equipo es una herramienta básica sobre todo cuando empezamos a hablar de trabajo remoto o teletrabajo y trabajo en tiempos de COVID-19 como los que llevamos viviendo desde el mes de marzo.
Esta forma de trabajar, en la que todos los participantes son responsables de las metas, es la más asertiva para cualquier tipo de organización. Esto no sólo porque es más fácil cumplir con los objetivos; sino también porque es la mejor manera de retener talento y fomentar un clima laboral envidiable.
¿Cuáles son las claves para que el trabajo en equipo salga a la perfección?
- Establece objetivos comunes. Para que tus empleados trabajen en equipo deben perseguir las mismas metas. Por ello, es importante que comuniques la misión de la empresa de manera uniforme y que definas cómo cada miembro y departamento puede contribuir a cumplirla.
- Crea un sentido de pertenencia. Los seres humanos necesitamos sentirnos parte de algo; por eso, el factor más poderoso en la creación de equipos es el desarrollo de una identidad común. Define qué identifica a tus equipos, fija valores y haz que cada miembro esté conciente de su impacto en el equipo.
- Haz que haya un entendimiento entre las partes. Es muy fácil criticar o subestimar el trabajo de los demás cuando uno no lo conoce o no lo ha ejecutado. Para crear empatía entre tus trabajadores, realiza ejercicios de rotación entre áreas. Así cada miembro sabrá en qué consiste la labor del otro y cómo puede contribuir a hacerlo mejor.
- Celebra los éxitos grupales. Aunque es importante también reconocer el trabajo individual, es clave que las recompensas se den por resultados en equipo. Cuando algo sale bien, reúne a todos los implicados y agradéceles su trabajo. Procura destacar el papel de cada uno, pero celebrar el resultado grupal.
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