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Sao Paulo, 1 feb (EFE).- La producción industrial en Brasil creció en 2017 el 2,5 % impulsada por el sector automovilístico, lo que representa el mejor resultado desde 2010 y el fin a tres años de caídas como consecuencia de las crisis económica, informó hoy el Gobierno.
La industria brasileña constató una mejoría el año pasado tras las profundas caídas experimentadas en 2016 (-6,4 %), 2015 (-8,3 %) y 2014 (-3,0 %), de acuerdo con el balance divulgado hoy por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
El sector fue uno de los más golpeados del país por la severa recesión económica registrada entre 2015 y 2016, que provocó, en ese periodo, un desplome del Producto Interno Bruto (PIB) de más del siete por ciento.
Brasil experimentó una leve mejoría el año pasado con un crecimiento que estará en torno al 1 %, a falta de datos oficiales consolidados, y que se ha reflejado de manera notable en la producción industrial del país.
En diciembre pasado, la subida fue del 4,3 % con respecto al mismo mes de 2016 y del 2,8 % en la comparación con noviembre de 2017, según señaló la entidad.
De esta forma, el resultado anual fue el primero en positivo desde 2013, cuando la producción aumentó el 2,1 %, y es el mejor desde 2010, año en el cual el sector tuvo un crecimiento récord del 10,2 %.
El sector automotriz fue una de las divisiones que ejercieron una mayor influencia sobre el crecimiento, al subir su producción el 17,2 % durante el año pasado frente a 2016.
También aumentaron las actividades relacionadas con equipamientos informáticos, productos electrónicos y ópticos (19,6 %), el sector metalúrgico (4,7 %) y las industrias extractivas (4,6 %).
"Prácticamente todos los sectores tuvieron crecimiento, pero el sector automovilístico, principalmente la fabricación de vehículos pequeños, fue el que más influyó. Gran parte de eso se debe a la mejora en el nivel de estoques y al aumento de las exportaciones", señaló el gerente del informe, André Macedo, citado en la nota.
No obstante, Macedo subrayó que todavía es "pronto para hablar de recuperación" y que, si bien 2017 rompió un periodo de caídas, aún "está lejos de lo ideal".
De hecho, el crecimiento en 2017 podría haber sido más expresivo de no ser por las caídas en la producción de derivados de petróleo y biocombustibles (-4,1 %), productos farmacéuticos (-5,3 %) y otros equipamientos de transporte (-10,1 %).
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