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McDonald’s debe echar el cierre a sus más de 800 locales en Rusia. Es otra de las grandes empresas que escapa de los dominios de Vladimir Putin. Sin embargo, los rusos contarán con una empresa local como Tío Vanía y varios food trucks.
El logo del Tío Vania se compone de una B en el alfabeto cirílico y pintada de amarilla tras un fondo rojo. Eso nos lleva muy rápidamente al de la empresa más famosa de fast food, McDonald’s.
El cambio de logo se produjo hace algo menos de 3 semanas. El truco de este lavado de imagen que han hecho los rusos se puede desmontar fácilmente ya que, si lo tumbas, se parece a la M de McDonald’s. Este anuncio mosquea bastante a los expertos en propiedad intelectual ya que, puede llevar a confusión ya que el fondo y el color son el mismo y lo único que cambia es una B del alfabeto cirílico por la mítica M de McDonald’s.
McDonald’s era uno de los principales mercados de Rusia
La empresa de comida rápida americana, hacía en el país ruso gran parte de su negocio: cerca del 10 % de todos sus ingresos. Allí tiene más de 800 establecimientos, de los que el 84 % son en propiedad y cerca de un 15 %, franquicias. La intención de los propietarios de los locales rusos es mantener a los 62.000 empleados que, hasta hace unas semanas eran empleados de McDonald’s.
De hecho, Putin presentó hace unas semanas un plan para nacionalizar algunas de las empresas entre las que se encontraba McDonald’s que pasará próximamente a llamarse Tío Vania y sustituye al famoso payaso de la sonrisa infinita por una matrioska.
Vladimir Putin ya tiene un plan para restablecer el mercado de la fast food
McDonald’s será una de las primeras empresas que se enfrente a la nacionalización de su marca. Rusia sustituirá sus locales por Tío Vania. En la capital rusa se han instalado más de 16 food trucks como ha anunciado elDiario.es. El jefe de departamento y servicios de Moscú, Alexei Nemeriuk, anunció a la agencia de noticias de Moscú que “Durante los tres días del festival de primavera de Crimea 16 food trucks se han instalado en Moscú. No solo hay con forma de matrioska, también hay otros modelos. Se han instalado junto a los restaurantes McDonald's y servirán hamburguesas y pancakes”.
Además de la cadena de restauración, en el plan de nacionalización del presidente ruso Vladimir Putin han entrado otras multinacionales como Ikea, Apple, IBM, Volkswagen y otras 60 empresas. Esa es la única forma de Putin para combatir un aislamiento que comienza a asemejarse al que la población rusa sufría durante la Guerra Fría.
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