Villa Germania, la 'casa de los horrores' de Chiclana donde estafaban a ancianos

La muerte aparentemente natural en Chiclana de María Babes, una alemana de 101 años, destapó hace un año el 'negocio' de Estrella y Markus, supuestos cuidadores de ancianos extranjeros solitarios. Su botín: 1.800.000 euros.

Una alerta de la Interpol, procedente de la policía alemana de Frankfurt am Main, sospechaba de la pareja de antiguos cuidadores de una residencia de ancianos en Tenerife, que se habían llevado a Cádiz a una anciana con la que ella tenía una relación de amistad.

Operación Teydea

Ahí se inician las pesquisas de la Guardia Civil de Cádiz. Las investigaciones permitieron localizar a María en la residencia de mayores Novo Sancti Petri de Chiclana, donde llegó tras pasar por varios hospitales debido a una situación grave de salud pero cuando fueron a rescatar a María Babes ya estará muerta e incinerada.

La Guardia Civil tiene serias sospechas de que pudo haber sido asesinada. Pero no hay autopsia que lo pueda confirmar.

Silvestre y Elisabeth

Encontrar a María servirá para rescatar a otros dos ancianos, Silvestre, alemán, y Elisabeth, holandesa, a los que 'cuidaban' en un chalé de Chiclana.

Los estafadores iban a engañar a Elisabeth, una mujer impedida de poco más de 70 años. Con ella habían suplantado la identidad de María ante notario para quedarse con una de sus propiedades.

Los agentes extrañaron el supuesto comportamiento de María, que había alternado episodios de enfermedad con otros de lucidez donde supuestamente había participado en dos protocolos notariales, en el que primero otorgaba un poder notarial absoluto a favor de sus cuidadores y luego los nombraba sus herederos. El propio notario, en reconocimientos posteriores de la investigación admitió que había sido engañado, que Elisabeth, treinta años menor, no era María.

Sus víctimas permanecían encerradas y atadas

A María, de 101 años, la mantuvieron encerrada varios meses maniatada. Con todas estas evidencias en la mano, los guardias civiles comunicaron a la autoridad judicial que tutelaba el caso que iban a proceder a la detención de la pareja, a la vez que solicitaron un mandamiento de entrada y registro para el chalet donde los cuidadores habían realizado sus supuestas labores. La orden llegó demasiado tarde.

Los otros dos ancianos que en ese momento malvivían en pequeñas habitaciones, con un radiador y una cama como casi único mobiliario. Cuando los encontraron estaban desnutridos y “parecían como drogados, aletargados, sin movilidad alguna”.

Su alimentación se basaba en sandwiches y agua a través de una sonda nasogástrica.

Semanas antes había fallecido otro anciano bajo el cuidado de Estrella y Markus, Gabrielle, un italiano. Antes de morir se habían apoderado, presuntamente, de 500.000 euros y sus dos propiedades en Tenerife.

Estafa, falsedad documental, apropiación indebida, maltrato, fraude, blanqueo de capitales, desobediencia y alzamiento de bienes

Tras el ingreso en prisión de la pareja de cuidadores, la Guardia Civil continúa con la investigación. El patrimonio de la pareja asciende a más de 1.800.000 euros. Además se han dirigido Comisiones Rogatorias Internacionales a Inglaterra, Italia, Alemania y Cuba, donde esta pareja sería titular de cuentas y productos financieros.

¿Y los familiares de estos ancianos? ¿dónde estaban?