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Sevilla, 31 ene (EFE).- La Junta de Andalucía defiende un modelo de financiación autonómica que resuma en dos los actuales fondos de transferencias a las autonomías, centre su reparto en el criterio de la población y aporte 16.000 millones más al año a las comunidades autónomas, unos 4.000 millones para la andaluza.
La consejera andaluza de Hacienda, María Jesús Montero, ha explicado hoy que estos 16.000 millones de financiación autonómica adicional no procederían de nuevos impuestos, sino de una mayor participación de las comunidades en la recaudación por IVA, que aumentaría del 50 al 75 por ciento, y por impuestos especiales, que crecerían del 58 al 75 por ciento.
Además, las autonomías mantendrían su participación del 50 por ciento en la recaudación por IRPF, según este modelo, que el Gobierno andaluz negocia en el Parlamento autonómico para conseguir el consenso de todos los partidos y que defenderá en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Junto a estos dos fondos que, según Montero, simplifican, hacen más transparente "y evitan arbitrariedades" en el reparto del modelo actual, la Junta también pide que se cree el Fondo de Sostenibilidad de los Servicios Públicos, que se financiaría con excesos de recaudación de años de bonanza para afrontar épocas de crisis, de forma similar al Fondo de Garantía de las Pensiones.
El modelo andaluz defiende, igualmente, que los ingresos de las comunidades autónomas se determinen según su población real ajustada y que la financiación de los servicios públicos se actualice anualmente, según el crecimiento del PIB nominal.
El primero de los dos fondos propuestos por la Junta, el de Financiación de los Servicios Públicos, atendería las necesidades de sanidad, educación y protección social, y requeriría 16.000 millones más, tomando como base datos del año 2014, en el que las comunidades autónomas hicieron "un gran esfuerzo" para afrontar la crisis, según Montero, que cifra en 4.000 los millones adicionales para Andalucía.
El segundo fondo, el de Desarrollo de las Autonomías, aglutinaría los actuales fondos de Suficiencia Global, de Cooperación y de Competitividad, y se distribuiría según la población.
Ademas, la Junta reclama que "se active" el Fondo de Compensación Interterritorial, "congelado desde hace años", según Montero, quien ha criticado que su dotación haya bajado de 500 a poco más de 100 millones de euros y que, ha matizado, "no tiene nada que ver con la financiación autonómica" porque está fijado en la Constitución.
También ha criticado el retraso en la aprobación del nuevo modelo porque, ha advertido, "mientras seguimos discutiendo", un andaluz recibe cada año 791 euros menos que un cántabro y Andalucía pierde 5.500 millones de euros con respecto a la media.
Montero rechaza que "la insuficiencia financiera" de las autonomías se pretenda paliar con copagos, "que atacan la igualdad de acceso a los servicios" o con más capacidad normativa sobre impuestos cedidos, "porque deben de subir más en las comunidades más pobres" para alcanzar los mismos ingresos.
El número de alumnos de Bachillerato y de universidades públicas, la tasa de paro y los dependientes asistidos también deben de ser criterios para fijar los ingresos autonómicos, según la Junta.
Respecto a hechos diferenciales como la insularidad, Andalucía pide que cada autonomía los negocie de forma bilateral con el Gobierno central, "pero siempre con absoluta transparencia".
La Junta también propone emitir deuda pública conjunta por varias comunidades autónomas o entre alguna comunidad autónoma y el Estado.
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