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Para a los que nos gustan las bicicletas, tenerla siempre a punto para nuestras rutas y paseos es todo un desafío. Por eso, queremos dedicar el artículo de hoy a ofrecer una serie de consejos para el mantenimiento de bicicleta.
No obstante, no debes olvidar la importancia de acudir a talleres profesionales para cualquier reparación. Sin duda, tallerdereparaciondebicicletas.es está ganando posiciones por su servicio de calidad y por la confianza que transmite a sus clientes. ¡Se encargan de reparar todo lo que no puedes hacer por ti mismo!
Ahora sí, no te pierdas estos 5 consejos para llevar un mantenimiento de tu bicicleta. Te adelantamos que la clave va a estar en la limpieza y en el engrase de los mecanismos, pero, ¡sigue leyendo para descubrirlo en detalle!
1. Contar con las herramientas básicas
Para llevar un buen mantenimiento de tu bicicleta debes hacerte con un kit básico de herramientas. Se trata de elementos muy específicos para estos medios de transporte y es importante que sean de calidad. ¡Son herramientas que valen para toda la vida!
De nada sirve comprar herramientas de mala calidad. Estas pueden estropear piezas y tornillos de tu bicicleta, arruinándolas por completo.
Pero, ¿qué debe contener este kit básico de herramientas? En concreto, no te deben faltar las siguientes: juego de llaves allen, destornillador plano, destornillados de estrella, cortacables, llave dinamométrica con medidas intercambiables y llave torx T25.
No obstante, si quieres completar tu kit, con el tiempo puedes adquirir también un extractor de rodamientos o un eje de pedalier.
2. Tener siempre a mano cables y fundas del cambio
Para que tu bicicleta funciona a la perfección, es básico que los cambios de marcha también lo hagan. Por este motivo, es importante tener siempre a mano unos cables y fundas de cambio.
Si, por ejemplo, vives en zonas muy húmedas y con barro, deberás realizar este mantenimiento, al menos, 2 veces al año. ¡Sobre todo cuando notes una mayor fricción de los cables!
Con los modelos de bicicletas que encontramos hoy en día, bastará con cambiar el cable y la funda del cambio trasero. Debes recortar limpiar muy bien y engrasar todos los puntos de fricción que puedan darse en estos elementos de tu bicicleta.
Para hacerlo, lo ideal es colocar la bicicleta en un caballete bien sujeta, así podrás acceder bien a los cables. Además, también podrás afinar el cambio de velocidades de tu bicicleta.
3. Hacer una limpieza de la transmisión
Por otra parte, un buen mantenimiento de tu bicicleta debe llevar consigo la limpieza de la transmisión. Pero, ¿con cuánta frecuencia? Lo ideal es hacerlo después de cada salida con la bici, ya que la acumulación de partículas, arena o aceita sucio, desgastará de manera notable los mecanismos.
La transmisión está formada por 4 partes fundamentales: la cadena, los platos, el cambio trasero y el casete. Para limpiarla, nuestra recomendación es que apliques desengrasante y esperes un minuto.
Cuando ya haya hechos su efecto, deberás limpiar toda la zona con agua caliente y un cepillo. ¡Solo así lograrás que desaparezcan todos los restos de aceite y suciedad! Después, puedes pasar un trapo para terminar la limpieza.
Con la limpieza hecha, el último paso es aplicar aceite en la cadena, en cada punto de giro de los eslabones y haciendo pasar la cadena por todas las velocidades. En cuanto al tipo de aceite, debes intercalar uno para climas secos y otro para climas húmedos en función de la zona donde te encuentres.
4. Revisar y mantener los tornillos apretados
Esta es una de las partes más sencillas para mantener tu bicicleta a punto. ¡Y también la más rápida! Solo debes revisar y apretar bien toda la tornillería de tu bici. Esto puede evitarte más de un problema mientras pedaleas.
Para hacerlo, lo mejor es usar una llave torque o dinamométricas que son perfectas para el apriete tanto en los puntos de giro como en los ejes pasantes del basculante de la bicicleta.
Además de estas llaves, existen otras más especificas para manillares y potencias, pero debes saber que con las del kit básico puedes lograr el mismo efecto. ¡Solo te llevará unos minutos hacer este mantenimiento antes de cada salida!
5. Ajustar la dirección
Por último, te damos como consejo tener un buen mantenimiento de la dirección. Sobre todo, porque siempre cae en el olvido.
En este aspecto, se debe desmontar la dirección para después limpiarla y engrasarla. Al final, los rodamientos están muy expuestos al agua y al barro por su parte inferior, por lo que hay que revisarlo una vez al mes.
Con todo esto bien limpio y engrasado, tocará volver a colocarlo y engrasar, así la dirección de tu bicicleta. La herramienta perfecta para este mantenimiento es la llave dinamométrica, ya que esos tornillos suelen ser de 4 o 5 Nm.
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