Los niños de la Cañada Real ven vulnerados los derechos fundamentales de la infancia

Es injustificable que más de 1.000 niños y niñas continúen sin suministro eléctrico en la Cañada Real después de un año. Tras vivir situaciones extremas como la tormenta Filomena en enero sin electricidad con la que poder calentar sus hogares o las olas de calor de este verano sin tener medios para refrigerar alimentos, estos niños, niñas y adolescentes comienzan un nuevo curso en una situación extrema.

Ante el problema de la vulneración de sus derechos fundamentales, como el derecho a la educación, son varias las entidades que proponen iniciativas para mejorar la vida de estos niños y niñas.

En este contexto, la Fundación SM busca promover la lectura entre la infancia de la Cañada Real a través de su programa ‘Escribir como lectores’, que comprende talleres de escritura creativa y encuentros con autores bajo la premisa de que “una obra tiene tantos escritores como lectores y tantas reescrituras como el número de veces que estos la leen”.

El objetivo: que los niños y niñas de la Cañada Real no se queden atrás

Aproximadamente más de 1.200 menores viven sin luz. menores escolarizados en Centros de Villa de Vallecas, menores que se ven obligados a seguir con sus estudios en inferioridad de condiciones que el resto de sus compañeros y a los que se les va exigir lo mismo que al resto para aprobar el curso.

El Preámbulo de la Convención de los Derechos de la Infancia recuerda que “la Declaración Universal de Derechos Humanos las Naciones Unidas proclamaron que la infancia tiene derecho a cuidados y asistencia especiales”. Y en el Artículo 3 de dicha Convención se afirma que:

1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, habrá una consideración primordial a que se atenderá el interés superior del niño.
2. Los Estados Partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas y administrativas adecuadas.

‘Escribir como lectores’, un proyecto que desarrolla desde 2009, propicia que los chicos y chicas participantes sean miembros activos de una comunidad de lectores y escritores de literatura en sus respectivas aulas o bibliotecas.

En el marco de esta iniciativa, los niños de la Cañada Real recibirán el próximo lunes 31 de enero la visita especial de Ricardo Gómez, autor de la novela ‘Ojo de Nube’, con quien compartirán “lectura y recreación, vivencias y sueños”.

Lo harán en el ámbito de los talleres de escritura creativa que organiza la fundación, y que implican a grupos de chicos y chicas en distintas prácticas de escritura en torno a una obra literaria, cuya lectura comparten antes de que llegue el encuentro con el autor, hecho que dota a todo el proceso de realismo y calidez humana.

Posteriormente, ya el día del encuentro se producirá un diálogo e intercambio de ideas respecto a la obra, momento en el que todos los chicos y chicas, el mediador y el propio autor se sienten coautores.

Las soluciones para una vuelta a la normalidad en la Cañada Real siguen pareciendo lejanas

Parece ser que las cosas siguen igual en la Cañada Real. La puesta en marcha del Grupo interministerial impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 para dar soluciones integrales a la población de la Cañada Real Galiana de Madrid se plantea como un nuevo espacio de negociación, pero sin voluntad y compromiso no servirá para ofrecer soluciones reales y urgentes para las familias de la Cañada.

El Gobierno central, el autonómico y el Ayuntamiento tienen la obligación legal de proteger los derechos de los niños y niñas que siguen sin poder acceder a una educación de calidad o una vivienda digna.

Trabajemos por que todos los niños y niñas crezcan con las mismas oportunidades. Será la mejor manera de construir un  mundo más justo.