30/11/2022 - 17:00
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El carsharing es un servicio de coche compartido que ofrece a sus usuarios una flota de vehículos durante cortos periodos de tiempo, en la mayoría de los casos minutos, aunque se permiten duraciones de horas o un día completo.
Este alquiler se debe reservar previamente mediante app móvil, internet o llamada telefónica. Se paga por el uso que se realiza del mismo, ya sea por el tiempo y/o kilometraje realizado, facturándose a final del mes. Es decir, consiste en el uso de un mismo vehículo por parte de varias personas, aprovechando los tiempos que el vehículo permanece parado, reduciendo el número de vehículos necesarios para satisfacer una movilidad sostenible.
Mediante este servicio, los usuarios se benefician de una alternativa al vehículo privado, eliminando los costes asociados a la propiedad de estos, costes fijos como impuestos y seguros, o variables como mantenimiento, aparcamiento, limpieza, etc.
El sistema se posiciona entre el alquiler de un vehículo, el coche privado, el taxi y el transporte público, fomentando además el uso de estos últimos, ya que el carsharing debe verse como un modo más para completar la oferta pública de transporte.
El carsharing ha demostrado ser clave para minimizar el impacto medioambiental de los medios de transporte
Durante el mes de septiembre se han vendido un 12,7 % más de estos automóviles eléctricos que un año atrás y han crecido un 43,7 % en lo que va de año. A pesar de este aumento en las matriculaciones de este tipo de vehículos, las cifras se sitúan aún muy lejos del objetivo marcado para este 2022, un paso necesario para poder cumplir con los objetivos de reducción de emisiones europeos.
Por ello, se hace necesario apostar por nuevas formas de movilidad que permitan fomentar el uso del vehículo eléctrico más allá del modelo de propiedad. Una de estas alternativas es el carsharing o coche compartido, ideal para las zonas urbanas. Se trata de un alquiler de coche en el cual se paga por horas o minutos, se realiza a través de una plataforma digital, permitiendo acceder al vehículo de forma flexible y sólo cuando existe la necesidad de usarlo. Es el concepto de pago por uso.
El carsharing es un acelerador de la sostenibilidad de los medios de transporte en parte gracias a que la mayoría de los coches empleados por las empresas en este modelo de movilidad suelen ser eléctricos.
Además, el mismo concepto de compartir representa una apuesta hacia la eficiencia en el uso del vehículo. En el carsharing un mismo coche suple las necesidades de movilidad de distintos usuarios. También permite reducir el parque de coches particulares en la ciudad y fomenta la renovación del parque, al usar en su mayoría vehículos modernos.
Beneficios del carsharing
Entre las características que le han permitido al carsharing convertirse en un acelerador del coche eléctrico están los privilegios de movilidad y aparcamiento con los que cuentan estos vehículos en las ciudades. Es el caso del YOYO, el coche eléctrico de la empresa italiana XEV, ideal para la movilidad urbana y periférica con el que se puede acceder a los sectores de Tráfico Limitado (ZTL) y disfrutar del aparcamiento gratuito en las zonas verdes y azules, sin límite de tiempo.
El YOYO ya forma parte de la flota Enjoy, el servicio de carsharing de Eni en Italia, en las ciudades de Turín y Bolonia. A partir de 2023 también estará disponible en Florencia, Milán y Roma. En Francia está presente en Niza, con el carsharing Shaary y en Alemania, a través de la empresa WeeGo.
El ahorro que representa el uso del carsharing
Pero, además de los beneficios de su uso en cuanto a comodidad, el carsharing también puede representar un ahorro considerable para sus usuarios. Ya no solo frente a otros servicios de transporte como el taxi o el VTC, sino también frente al vehículo en propiedad.
Diversos estudios demuestran que un vehículo de uso particular pasa el 90 % del tiempo estacionado, con lo cuál únicamente se aprovecha el 10 % de su vida útil, un hecho que se suma, además, a los elevados costes tanto de la electricidad como de los combustibles. Por ello, no es de extrañar que en la actualidad unos 15 millones de personas utilicen el carsharing en Europa.
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