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Los chimpancés siguen aprendiendo y refinando sus habilidades incluso en la edad adulta, lo cual podría ser crucial para la evolución del uso diversificado y complejo de herramientas.
Se llegó a esa conclusión tras un estudio llevado a cabo por seis investigadores de instituciones en Alemania, Costa de Marfil, Estados Unidos y Francia, el cual fue publicado este martes en la revista 'PLOS Biology'.
La capacidad de adquirir conocimientos de los chimpancés
Los humanos poseen la habilidad de aprender continuamente a lo largo de sus vidas. Los autores propusieron la hipótesis de que esta capacidad es responsable de la notable flexibilidad humana en el uso de herramientas, un factor crucial en la evolución de la cognición y la cultura.
Mathieu Malherbe, un destacado investigador del Instituto de Ciencias Cognitivas Marc Jeannerod en Francia, junto con un equipo de expertos, se embarcaron en un estudio para explorar una fascinante pregunta: ¿Los chimpancés comparten la habilidad de los humanos para desarrollar y perfeccionar técnicas de herramientas a medida que envejecen?
La evolución del uso de herramientas
Los autores observaron a 70 chimpancés salvajes de diferentes edades utilizando palos para recuperar comida mediante grabaciones de vídeo recopiladas durante varios años en el Parque Nacional de Taï, en Costa de Marfil.
Con el paso del tiempo, los chimpancés mejoraron su destreza en el uso de agarres apropiados para manipular los palos. Estas habilidades motoras alcanzaron su plena funcionalidad a la edad de seis años, pero los primates siguieron perfeccionando sus técnicas hasta bien entrada la edad adulta.
El aprendizaje constante
Algunas habilidades avanzadas, como el uso de palos para extraer insectos de lugares difíciles de alcanzar o ajustar el agarre para adaptarse a diferentes tareas, no se desarrollaron completamente hasta que los chimpancés alcanzaron al menos los 15 años.
Esto indica que no se trata únicamente del desarrollo físico, sino que también involucra la capacidad de adquirir nuevas habilidades tecnológicas que se mantienen a lo largo de la vida adulta.
Por lo tanto, la preservación de la capacidad de aprendizaje hasta la edad adulta emerge como un atributo sumamente valioso para las especies que dependen del uso de herramientas, y constituye una noción fundamental en el estudio de la evolución tanto de los primates como de los seres humanos.
Los científicos señalan que en los chimpancés que viven en estado salvaje, el proceso de aprendizaje del uso de herramientas se extiende a lo largo de toda la vida adulta, revelando así una complejidad y flexibilidad cognitiva que se mantiene incluso en etapas avanzadas de desarrollo. Este fenómeno respalda la hipótesis de que el desarrollo de cerebros grandes en los homínidos posibilita un aprendizaje continuo y adaptable que perdura durante las dos primeras décadas de vida. En otras palabras, la capacidad de aprendizaje prolongado puede haber sido un factor crucial en la evolución de la inteligencia humana.
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