Las chinches atacan de nuevo y Francia se enfrenta a una auténtica crisis por estos insectos

Proliferan con gran rapidez, son pequeñas, molestas por sus picaduras y se aferran a nuestros muebles y colchones complicando ampliamente la tarea de desinfección. Las chinches están asociadas a épocas donde la higiene no era tan habitual o escaseaba. Sin embargo, a pesar de estar entrando en la cuarta era de la revolución tecnológica, estos pequeños y molestos insectos vuelven al ataque, demostrando que es posible que nunca vayan a dejarnos del todo.

En estos días, París se encuentra realmente angustiada por el incremento veloz y amplio de la infección de hogares por chinches. Hace escasos días, la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, se dirigía a los habitantes de su país por esta plaga que amenaza con convertirse en crisis.

"Los chinches de cama son una angustia para nuestros ciudadanos, atenazados por la idea de afrontarlos. Son un auténtico calvario para los que lidian con ellos. La infección de una vivienda puede ser un infierno para los que viven allí", comentaba la primera ministra mostrando su preocupación por la situación.

Los chinches no se han ido de Europa

Muchos medios están comparando esta plaga con las que hubo después de la Segunda Guerra Mundial, un momento en el que Europa quedó completamente destrozada y con grandes dificultades para mantener higiene en los hogares de forma regular. De esta misma forma, también se están haciendo eco, de otros momentos de plaga de este insecto molesto en el mundo, como la que tuvo lugar en 2010 en Nueva York o la de España de 2019 a 2020, cuando su población aumentó un 70 %.

Según el director general de la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA), Jorge Galván, “Es cierto que la plaga de chinches, que desde hace unas décadas se consideraba erradicadas en el primer mundo, están cobrando últimamente cierta relevancia".

Pero, ¿Es esto suficiente para entrar en pánico? Lo cierto es que aunque esta plaga se ha extendido a otros países como México, o que en España se hayan visto brotes, como se denunció en Barakaldo estos días, lo que más preocupa de la reaparición de estos insectos que se creían erradicados, es la facilidad con la que se pueden estar propagando debido a los servicios de transportes, ya que se han llegado a encontrar en trenes y otros medios, lo que empieza a preocupar a los vecinos de Francia.

El impacto de la movilidad amplificada

Como ya ocurrió durante la pandemia de coronavirus, lo que preocupa especialmente es la propagación de las chinches a otras zonas de Francia e incluso a otros países europeos, es la amplia movilidad de personas. París se encuentra preparándose para recibir los próximos Juegos Olímpicos el verano que viene, lo que incrementará aún más la llegada de turistas y visitantes a la capital.

Con esta perspectiva, es esencial que el país galo frente la plaga antes de que se extienda o se prolongue en el tiempo, llegando a causar una auténtica crisis por chinches.