Los cigarrillos electrónicos podrían ser perjudiciales para la salud

Fumar es un vicio muy asentado entre gran parte de la población que no conlleva nada bueno para la salud. Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS), como cientos de estudios médicos avalan los efectos letales del tabaco. Muchos de los fumadores son conscientes de ello y tratan de abandonar un hábito que más allá de limitar la salud, tiene un elevado coste mensual. Para ello, hay quiénes se escudan en los cigarrillos electrónicos o vapeadores para así autoconvencerse de que no fuman. Sin embargo, el hábito es el mismo, y también tiene efectos negativos en la salud.

¿Son buenos los vapeadores?

Por regla general, los cigarrillos electrónicos están considerados con un nivel de riesgo menor al tabaco. Sin embargo, los investigadores aseguran haber encontrado una pista: sus saborizantes podrían causar problemas cardiacos.

Como decíamos, su principal público es el de los fumadores que no pueden curar su adicción. Por esa razón, en ocasiones recurren a los cigarrillos electrónicos con la esperanza de evitar las sustancias químicas cancerígenas del humo del tabaco.

Y es que fumar tabaco no solo causa cáncer de pulmón, ya que es la principal causa de ataques cardiacos. También hay que decir que hasta el momento no se sabe mucho sobre un vínculo entre los cigarrillos electrónicos y las enfermedades del corazón. No obstante, las sustancias químicas en el vapor inhalado podrían representar riesgos también entre los cada vez más adolescentes que comienzan a vapear.

“Me es imposible arrancarle la arteria a un paciente y realizarle pruebas” para ver su reacción al vapeo, dijo el doctor Joseph Wu, director del instituto cardiovascular de la Universidad Stanford.

Preocupación en la Comisión

A todo esto, la Comisión Europea lamenta el auge de los cigarrillos electrónicos y otros productos alternativos del tabaco que se comercializan “cada vez más con declaraciones engañosas”, especialmente entre la población joven de la Unión Europea.

Esto es lo ha expresado el comisario de Salud Vytenis Andriukaitis. Ha sido en una declaración con motivo del Día Mundial sin Tabaco. El lituano advierte de que, a nivel mundial, las cifras son “alarmantes”. Y es que cada año mueren más de siete millones de personas por los efectos del consumo de tabaco.

“Estoy especialmente preocupado por los jóvenes que comienzan a inhalar vapor de tabaco y a consumir toda una serie de nuevos productos como los productos del tabaco tratados térmicamente y los cigarrillos electrónicos, que se comercializan cada vez con más declaraciones engañosas”, ha apuntado.

Asimismo, Andriukaitis ha subrayado que la UE está “empeñada” en proteger a los ciudadanos de los efectos nocivos del consumo de tabaco y, en esa línea, ha recordado que el 20 de mayo se puso en marcha el sistema europeo de trazabilidad y medidas de seguridad de los productos del tabaco.