Clubhouse: así es la nueva red social de moda

La app Clubhouse ha aterrizado en España y ya es lo más buscado entre los jóvenes y adolescentes. Se trata de una red social que invita a la tertulia. La gracia consiste en que solo se utiliza la voz para comunicarse. No se pueden dejar mensajes escritos ni grabar, lo que permite no estar pendiente de la pantalla del móvil y que las conversaciones sean más distendidas. Tampoco se pueden poner emoticonos ni 'me gusta', es una especie de radio interactiva o una gran mesa redonda virtual.

Eso sí, para acceder tenemos que tener una invitación, introducir nuestro número de teléfono, teclear un código de confirmación, seleccionar las áreas de interés y seguir a tus amigos.

Pero, ¿es tan sencillo? ¿Cómo funciona Clubhouse? 

El funcionamiento de Clubhouse es similar al de una llamada con varias personas al mismo tiempo. "Un chat de audio directo", resumen los promotores del invento. La app permite escuchar, a través de salas o foros, conversaciones de gente que quieren que otros oigan lo que dicen.

Cuando abres la aplicación puedes ver 'salas' llenas de gente hablando, todas abiertas para que puedas entrar o salir, explorando diversas conversaciones. Más que una comunidad, es una red de comunidades interconectadas y diversas.

Cuando se entra en una sala, se puede pedir turno para hablar y el moderador decide si concede la palabra o no. La clave está en que, al acceder a la aplicación, se definen los gustos e intereses, y un menú permite ver las salas que los algoritmos seleccionan para el usuario en función de sus elecciones.

Si estás dentro de Clubhouse y quieres lanzar un mensaje, en lugar de teclear algo y pulsar 'enviar' basta con charlar con los demás, como si fuera por teléfono. Los emoticonos se sustituyen por entonaciones.

Aquí también existen 'followers' (seguidores) y 'following' (a los que cada uno sigue). El número de cada uno de ellos aparece expuesto junto al perfil, junto con una breve presentación de cada miembro de la red.

El interface se reduce a cuatro iconos:

• Una lupa, para explorar contactos, gente o clubs de conversación, con sugerencias siempre a mano.
• Un sobre, con las invitaciones disponibles y un listado de tu agenda de contacto con la cifra de amigos que cada cual ya tiene.
• Una campana, con la información de la actividad de los contactos a los que cada uno sigue, junto con invitaciones para unirse a conversaciones en curso. En esos casos, se puede elegir entre "me apunto" o "ahora no, gracias".
• Por último, aparece el icono del perfil, como en otras redes sociales.

El nuevo fenómeno social promete hacer mucho ruido en Internet

La aplicación pertenece a la factoría estadounidense Alpha Exploration, 'Made in California?, fundada hace justo un año por Rohan Seth y Paul Davison, y dirigida por este último, un graduado de la universidad de Stanford que no tardará en aparecer en las listas de millonarios de Forbes.

A ella han accedido famosos como el actor Ashton Kutcher, los músicos Jared Leto y Drake o el mismo propio Elon Musk, a cuya charla se unieron 5.000 personas y que trabaja con 'startups' en las que tiene acciones Andreessen Horowitz, principal inversor de la red social.

En Clubhouse se habla de todo. Sus creadores señalan que lo ideal sería que la experiencia en esta app se pareciera más a una plaza del pueblo, donde personas de diferentes orígenes, religiones, afiliaciones políticas, orientaciones sexuales, géneros, etnias e ideas sobre el mundo se reúnen para compartir sus puntos de vista, ser escuchados y aprender. Algunas de estas comunidades se reúnen para debatir. Otras vienen a relajarse y bromear. Otras celebran fiestas de escucha y charlas junto al fuego.

Solo compatible con iOS y con invitación

Esta red social todavía se encuentra en su fase beta, y está únicamente disponible para usuarios de iOS. La aplicación solo está disponible para su descarga desde el AppStore de Apple, para su uso en iPhone o iPad. Muy pronto llegará a Android, aunque no hay fechas precisas.

Además, como un buen club, solo se puede acceder por invitación. El benefactor puede ser cualquiera que haya sido tocado por la viralidad de Clubhouse. Cada uno de ellos dispone de dos invitaciones. La tarea de conseguir un amigo que ceda una de sus cotizadas invitaciones queda al ingenio o poder de convocatoria.

Siempre puedes descargarte la app y registrarte con un número de teléfono móvil. Si haces esto, aunque no tengas invitación, puede que alguien de tus contactos que ya esté dentro, vea tu número y te envíe una de estas cotizadas invitaciones.

Privacidad

Esta app te pedirá tus datos de contacto (el ID del usuario, como nombre, apellido y apodo), así como tu número de teléfono y tu correo electrónico, desde cuya dirección se exige confirmar el alta.

También se solicita el acceso a la agenda de contactos e identifica el tipo de dispositivo. El software ya se encarga de recopilar datos de uso del audio así como acaparar lo datos de errores para sus tareas internas de diagnósticos.

No queda claro si se almacenan las conversaciones. También cuestionamos cómo bloquear o expulsar de la red a los usuarios que tengan un comportamiento inadecuado frente a las normas básicas de conducta.

Después de casi un año de solitario teletrabajo, se agradece la compañía en una conversación ajena dentro de Clubhouse. Abriendo 'salas' lo mismo acabas en un rincón especial al que merece la pena volver, que en un lugar donde no hay nada interesante que escuchar. La experiencia es muy parecida a ir escuchando la radio o un podcast, aunque hay algo más de espontaneidad, con gente que se va sumando al diálogo de forma casual.