Corea del Norte estableció el pasado jueves el estado de "emergencia máxima" tras la detección de un caso de la variante ómicron. Ante dicha situación, el país no ha querido aceptar ayudas procedentes del exterior.
Los efectos secundarios y a largo plazo del coronavirus ha cambiado la forma de vida de muchos afectados, llegando incluso a darse casos de Covid persistente en niños.