La mayor convocatoria de docentes en una década

Más de 185.500 personas se enfrentan en estos días para poder ganar una de las más de 30.500 plazas que se han sacado en esta convocatoria de oposiciones a docente.

El objetivo es reducir la temporalidad de los maestros y profesores al 10% antes de 2022. Este plan, nació de un acuerdo en el año 2017 por parte del Partido Popular y los principales sindicatos, Comisiones Obreras, UGT y CSIF.

En la actualidad hay casi un 30% de interinos en las plantillas escolares, cuando concluya 2022 deberían haberse convocado un total de 139.000 plazas. Ese pacto se alcanzó tras años de recortes sociales y protestas de la marea verde en la calle.

La mayoría de docentes se enfrentarán este sábado, a la convocatoria, aunque el País Vasco las celebró la pasada semana

Beatriz García, secretaria de Juventud de CCOO se presenta a las oposiciones de Infantil. A parte de tener experiencia en un centro de ocio educativo de titularidad privada, su interés siempre ha sido trabajar en la función pública.

El sábado muchos docentes se enfrentan a un tema teórico que supone un 30% de la nota, y a un caso práctico que suma el 70% final. Si lo superan, tendrán que presentar una programación didáctica para todo el curso y exponer ante un tribunal una unidad (lección).

Por otro lado, el sindicato CCOO pide sean no eliminatorias. Para que les permitan que los docentes aspirantes la oportunidad de realizar todas las pruebas de la fase de concurso. Que sean valoradas de forma global por su actuación en todas ellas y no como ahora, donde suspender el primer examen impide seguir con los demás.

Acabar con la precariedad en el magisterio

Se supone que con estas cifras de docentes que se presentan a la que ya es considerada la mayor convocatoria en 10 años, será la gran oportunidad para zanjar con la precariedad laboral en el ámbito del magisterio.

Pues los múltiples destinos que reciben muchos interinos, son lo que acaban perjudicando a todo el alumnado. Muchos de los aspirantes son interinos que llevan años saltando de un colegio a otro y con periodos en paro. Y los más precarios no cobran las vacaciones de verano.

Este 2019, tres de cada cuatro plazas de las oposiciones son para maestro. Se presentarán 12 aspirantes por cada plaza de maestro de Infantil que se ha convocado. Y cada uno que opte a un puesto de docente en primaria tendrá que competir con otros seis, según datos ofrecidos este jueves por CC OO en su informe "Oposiciones 2019. Función pública docente".

Las plazas más accesibles son para las especialidades como música (5,7 aspirantes por puesto ofertado), pedagogía terapéutica (7), audición y lenguaje (6), inglés (5,7) o francés (5,5).

Si este año se han convocado oposiciones a maestro, al año siguiente se convocan para profesor de secundaria. Pero este curso la Comunidad Valenciana, Galicia, Baleares, Cataluña y Aragón convocan también a docentes de instituto, FP, escuelas de idiomas y enseñanzas artísticas.

Las posibilidades de hacerse con la plaza crecen en este caso. Se presentan cuatro docentes a cada puesto de secundaria, seis para profesor de música y 2,5 a la Escuela Oficial de Idiomas.

Comisiones Obreras considera difícil alcanzar la cifra estimada en los acuerdos, ya que las comunidades autónomas se están quedando cortas en las convocatorias

Ya se han aprobado o están en mesa de negociación el 66,7% de ellas, pero para cumplirse el acuerdo faltan otras 46.200 plazas antes 2022 y las regiones no las contemplan.

"Pedimos que se redimensionen al alza las ofertas de empleo público porque si no al final del proceso estaremos en un 20% de temporalidad, no en el 10% previsto"ha reclamado Francisco García, secretario general de la Federación de Enseñanza de CC OO.

Los docentes cobran en España una nómina superior a la media de los países de la OCDE. Son unos salarios algo más altos que en la enseñanza privada concertada, por eso, muchos de los maestros que están en los centros subvencionados con fondos públicos se presentan para ganar una oposición que no necesitan para dar clases en sus centros, donde, además, las condiciones laborales son peores (más horas de clase) y el puesto no es vitalicio.

Las plantillas de docentes están muy envejecidas. La edad media son unos 46 años, a la vez que son precarizadas

Durante los años 2010-2011, con José Luis Rodríguez Zapatero de presidente, solo se pudo sustituir con puesto de funcionario a tres de cada 10 jubilados.

Luego, con Mariano Rajoy, bajó en 2012 el reemplazo a uno de cada diez y en 2014 subió a cinco de 10. Desde los presupuestos de 2016 se sustituye al 100% de los que se retiran con plaza fija, pero no es suficiente.

Los puestos de quienes se jubilaron se cubrieron con interinos, lo que supone en la actualidad un 30% de la plantilla de docentes. Pero se necesitaron menos trabajadores porque en 2012 matricularon a más alumnos por clase y se acabaron los desdobles pedagógicos en muchas asignaturas complejas, y los docentes de apoyo para los que necesitan una atención especial.

La relación de alumnos por clase ha vuelto a bajar tras la crisis y eso impulsa aún más esta enorme oferta pública de plazas de maestro y profesor.

Durante el 2012 se incrementaron las horas de clase de cada enseñante y se permitió que pasasen 15 días sin sustituto si el titular estaba de baja, dos medidas que también contribuyeron a destruir empleo.

El Gobierno socialista ha limitado este curso el tiempo sin cubrir las bajas, los alumnos que cursen bachillerato y con necesidades especialices no pueden estar sin docentes.

Pero la reducción o no de la carga lectiva se ha dejado en manos de las comunidades (20 a 18 horas en secundaria y de 25 a 23 en primaria).

Desde CC OO dicen que los efectos van a tardar en verse porque los compromisos de las comunidades es a medio plazo y además, el Gobierno lo ha dejado a medias.