¿Qué es exactamente la ecpatía? ¿Guarda algún tipo de relación con la empatía?

Es probable que no hayas oído hablar de la “ecpatía”, ya que es un ámbito que no se encuentra recogido por la RAE. Sin embargo, este término surgió en el ámbito de la psicoterapia y de la medicina, además de guardar una estrecha relación con la empatía.

¿Qué quiere decir ecpatía?

Tener empatía hacia otra persona es algo que a muchos les resulta un problema, ya que sus sentimientos aparecen multiplicados por tres. Sin embargo, existe otro término que guarda relación con él y que, quizás, no hayas oído hablar de él. Nos referimos a la “ecpatía”.

Este término surge de la psicoterapia y la medicina, y en la actualidad es realmente útil en la vida de las personas. El catedrático de psiquiatría, José Luis González de Rivera, fue el encargado de establecer esta palabra en 2005 con el objetivo de definir un proceso voluntario de exclusión de sentimientos y motivaciones inducidas por los demás.

Según él, la ecpatía es la capacidad que nos permite identificarnos con el sufrimiento del otro, tal y como ocurre con la empatía. Sin embargo, esto no llega a los límites de la empatía.

Sí es cierto que pueden guardar relación ambos términos, pero los expertos en psicología prefieren denominarlo como el límite de la empatía o una actitud complementaria de la misma.

Una ayuda contra los trastornos emocionales graves

La empatía es algo que siempre nos han enseñado, desde niños, por lo que ya estamos bastante acostumbrados. Sin embargo, es necesario conocer los límites de este tipo de sentimientos, ya que pueden terminar por hacer daño a nuestra salud mental.

En el caso de la ecpatía, también es una herramienta que impide que la identificación con el sufrimiento de otra persona nos lleve a olvidarnos de nosotros mismos. De esta forma, estamos ante un mecanismo que ayuda a regular la empatía, por lo que es clave a la hora de luchar contra los trastornos emocionales más graves.

El arma perfecta para protegernos de las manipulaciones

Por si no fuese poco, además de las funciones que hemos mencionado con anterioridad, existen otras que nos ayudan a dar una respuesta eficaz a las emociones del otro. En este caso hablamos de protegernos de los demás y de posibles manipulaciones a las que nos someten.

Como ya sabemos, una persona narcisista busca someter a los demás en su propio beneficio, por lo que recurre a una serie de comportamientos que hacen que la empatía pase a ser un arma de doble filo.

Por eso, contar con recursos como la ecpatía es muy necesario para separar el sufrimiento de otra persona, discernir para ver la realidad de las cosa y entender que estamos ante un posible caso de manipulación.

Así, la ecpatía se convierte en una herramienta útil donde, según los expertos, existe la posibilidad de frenar a las personas narcisistas que pretenden hacernos daños con sus sentimientos “en vano”.