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Santiago de Chile, 18 mar (EFE).- El Gobierno chileno lanzó hoy un sistema de "red de vigilancia móvil" en la región metropolitana de Santiago, de 7,2 millones de habitantes, basado en drones, como parte del "plan calle segura" que el Ejecutivo implantará finalmente en todo Chile frente al aumento de la delincuencia.
La incorporación del sistema fue inaugurado por el presidente Sebastián Piñera, quien indicó que el procedimiento ya tiene aplicación piloto en la ciudad norteña de Antofagasta con seis drones dotados de cámaras infrarrojas y de visión nocturna con capacidad de transmitir y grabar en tiempo real.
El mandatario explicó que en la capital chilena tendrán drones las comunas de La Cisterna, Pedro Aguirre Cerda, Conchalí, Santiago y Puente Alto -ocho cada una de ellas- que en total serán 154 cámaras, siete portales lectores de patentes (matrículas) y cuatro centrales de monitoreo.
Todas ellas estarán conectadas con Carabineros, la Policía de Investigaciones (PDI) de Chile y la Intendencia Metropolitana de Santiago, precisó el presidente.
"Éste es un plan nacional para utilizar todos los medios a nuestro alcance para darle mayor eficacia a la lucha en contra de la delincuencia y darles más tranquilidad a las familias", señaló Piñera en una ceremonia que se celebró este lunes en la Plaza de la Constitución, situada en el frontis norte del Palacio de La Moneda.
El mandatario recalcó que "los que verdaderamente atentan contra la libertad de los derechos humanos y en contra la capacidad de las familias chilenas de buscar la felicidad son los delincuentes, y no aquellos que hacemos todo lo posible para combatirlos".
Destacó que, con esta medida, "los grupos beneficiados son la clase media chilena y las familias más vulnerables, que podrán ver cómo estas tecnologías también se ponen al servicio de ellos".
Durante este año el plan será replicado también en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Biobío y La Araucanía y en el resto del país se aplicará en el año 2020.
En esta misma línea de política de seguridad, el Gobierno enviará en el transcurso de esta semana un proyecto de ley que rebaja la edad a 14 años para el control preventivo de identidad, una iniciativa que ha causado mucha polémica entre el bloque de la oposición, que ya ha anticipado que no lo va a aprobar.
En este sentido, el mandatario sostuvo que espera "que los parlamentarios escuchen la voz de la gente que está expresando su angustia, su desesperación, por el efecto que la delincuencia y el narcotráfico está teniendo en sus familias, en su calidad de vida".
"Espero que cuando el proyecto de ley esté en el Congreso esta semana podamos tener una discusión abierta, de buena voluntad, para lograr entregarle los instrumentos que requieren nuestras policías", subrayó.
El senador del Partido Socialista (PS), José Miguel Insulza, quién participó en la ceremonia de este lunes, señaló que rebajar la edad "es un portazo a la privacidad".
"Es una invasión de la privacidad, es un problema complicado. Yo no soy partidario de ampliar la edad, quiero decirlo con toda claridad, ya está bien y para controlar eso hay otra fórmula, la Policía ya tiene las suficientes atribuciones", añadió el excanciller y exsecretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
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