La nueva FP formará para afrontar los retos actuales del agua

Tras su aprobación en el Consejo de Minsitros, ya está en marcha la nueva Ley de Formación Profesional bajo el anhelo del Gobierno de impulsar esta rama de la educación en España con 200.000 plazas en los próximos cuatro años, especialmente para afrontar los retos de transformación tecnológica y digital a los que se enfrentan la economía y la sociedad. Y es que el 40,1 % de las ofertas de trabajo se dirige a los titulados en Formación Profesional, frente al 33,7 % que solicita titulados universitarios, según Adecco.

Debemos apostar por una Formación Profesional que hable de derechos, de conexión con la sociedad, de bienes comunes y cuidados, de tecnologías sostenibles, de apertura e innovación y de gestión pública participativa.

La Formación Profesional es crucial para reducir el paro juvenil

Llevar la economía hacia modelos circulares para hacer un planeta más sostenible es quizás el mayor reto al que se afronta el mercado laboral, además de formar a trabajadores cualificados y reducir el paro juvenil, que en España es del 42 % en los menores de 24 años, el más alto de la Unión Europea después de que la pandemia del COVID-19 lo disparase desde el 31,5 % en solo un año y medio, según la OCDE. Por ello, fomentar la FP es vital para reducir esta cifra, ya que cuenta con una inserción laboral superior al 70 % en jóvenes de esta edad, según Ágora, que también insiste en la necesidad de fomentar la FP Dual, formación que creció un 9,3 % en 2020 en alumnos matriculados, el mayor aumento en una década.

Según un estudio del Centro de Referencia Nacional en Energía Eléctrica, Agua y Gas (CEAGU) sobre las Necesidades formativas del sector del agua en España, "se detecta, en general, la necesidad de diseñar y desarrollar cursos relacionados con las nuevas tecnologías y la digitalización relacionadas con la gestión del agua, debido a que el uso de nuevas herramientas requiere una serie de conocimientos que, a las empresas, por lo general, les cuesta encontrar en el mercado". Por otra parte, según el estudio, el 85 % de las titulaciones de la familia Energía y Agua están dedicadas al sector de la Energía, escaseando las especialidades formativas orientadas al sector del agua. Por ello es necesario hacer más atractivo este sector para los jóvenes.

En este sentido la nueva ley de Formación Profesional reconoce el papel que tienen las empresas respecto a su colaboración con los centros educativos para desarrollar el marco de Formación Profesional Dual. Asimismo, tal y como recoge Ágora Diario, persigue incorporar la innovación, el emprendimiento, la digitalización y la sostenibilidad en una oferta formativa que atienda a dar respuesta a las necesidades de formación de la ciudadanía y de las empresas.

Ágora amplía que, en el caso del agua, los ciclos formativos de este sector ya empezaron a desplegarse en modalidad dual en 2014, de la mano de la empresa Agbar, que se ha convertido en el referente de la Formación Profesional Dual del Agua en España, promoviendo su despliegue territorial en colaboración con comunidades autónomas, ayuntamientos y centros educativos. El medio especializado en el sector del agua cita como ejemplo casos en Tarragona y Granollers, en Cataluña; La Laguna, en Canarias; o Santiago de Compostela en Galicia.

La filial de Agbar en Galicia, Viaqua, suscribió en 2017 un convenio de colaboración con la Xunta que ha permitido formar en Santiago a más de 40 alumnos en tres promociones del ciclo formativo de grado medio en redes, instalaciones y estaciones de agua en modalidad dual.

Es de vital importancia formar a jóvenes en la gestión del agua

El pasado viernes la ONU informaba de que no se están llevando a cabo medidas suficientes para frenar el calentamiento global a una temperatura aproximadamente a 1,5º y calcula que, a este ritmo de emisiones, llegaría a los 2,7º. Además, las sequías aumentan y causan estragos en vastas regiones de La Tierra, especialmente en países subdesarrollados como Somalia y Afganistán. Mientras tanto, el agua es un recurso vital para la vida que se agota y que se despilfarra. Por eso, es de suma importancia fomentar la Formación Profesional para formar a profesionales que afronten los nuevos retos de la gestión de los recursos hídricos.