'Harry & Meghan' despellejan a la monarquía británica en su documental de Netflix

Harry & Meghan, la serie documental de Netflix dirigida por Liz Garbus, ya se ha estrenado en la plataforma. Compuesta de seis episodios, la docuserie -cuyo estreno se había estado posponiendo a causa de la muerte de la reina Isabel II- está arrasando tanto en audiencia como en reacciones en medios y redes sociales, tal como era de esperar. 

Los primeros 60 minutos de esta mega producción han desvelado vídeos inéditos que se grabaron en marzo de 2020, pero también han sacado algunos de los trapos más sucios del Palacio de Buckingham, como la polémica entrevista que Lady Di dio a la BBC.

Harry & Meghan no es el primer proyecto televisivo con el que los duques de Sussex tratan de transmitir a los seguidores de las intrigas palaciegas de la Familia Real Británica su versión de los hechos (de hecho, la mayor parte de las revelaciones de la nueva docuserie ya se habían hecho públicas en el documental Harry & Meghan: An African Journey o en la famosa entrevista que la pareja concedió a Oprah Winfrey), pero sí el más intensivo.

Harry & Megan: sus declaraciones más polémicas

En el primer capítulo, Meghan declara que nunca se había sentido tratada como "una mujer negra" hasta llegar a Reino Unido. Según Harry "Las instrucciones de palacio eran que no respondiéramos a los ataques... Era como si mi novia estuviera obligada a pasar por un rito de pasaje. Pero la diferencia aquí era la cuestión racial".

Los ataques a la Familia Real no pueden ser más evidentes: Meghan confiesa que, tras casarse, se dio cuenta de que nunca iban a protegerla y, a su vez, Harry reconoció que le llegaron a perseguir entre 30 y 40 veces en coche.

La sombra de Lady Di

Son varias las ocasiones en las que los protagonistas de Harry & Meghan hablan de Diana de Gales, incluso en uno de los muchos vídeos íntimos cedidos para la producción podemos ver a la duquesa de Sussex acercando a uno de sus hijos (en brazos) a un retrato de su suegra mientras se refiere a ella como “la abuela”.

Los protagonistas de la docuserie (especialmente el príncipe Harry) insisten en los paralelismos entre Meghan y Diana, basándose, por un lado, en la que ellos consideran una sensibilidad social compartida y, por otro, en el acoso que ambas habrían recibido por parte de los medios.  

La reconciliación con los príncipes de Gales parece improbable

Los periodistas expertos en la Casa Real, a los que el príncipe Harry critica en el tercer episodio, ya han reaccionado al documental expresando que, tras esta serie, es bastante improbable un acercamiento entre los hijos de Lady Di. 

Sin llegar a especificar que se están refiriendo a los príncipes de Gales, hay varios momentos en las entrevistas en las que se intuye que hablan de ellos. Por ejemplo, se cree que el príncipe Harry podría estar hablando de su hermano cuando asegura que los hombres de su familia eligen a sus esposas “siguiendo a su cabeza” (descartando a las candidatas no aptas para los requisitos de los royals), mientras que él “decidió seguir a su corazón”.

Por su parte, Meghan cuenta que, cuando conoció a Kate Middleton, la actriz estaba “descalza y con unos vaqueros rotos” y, acto seguido, se lamenta del contraste entre la frialdad de su familia política y su propia actitud más cálida ("siempre me ha encantado dar abrazos", asegura). Como reza un rótulo al inicio del documental, la Familia Real ha declinado hacer declaraciones para el mismo.