Incendio forestal en El Perelló, controlado

El incendio forestal originado en El Perelló de Tarragona, se ha conseguido estabilizar.

Durante toda la noche, más de 200 bomberos han estado sobre el terreno para conseguir que el incendio continuase avanzando. El temor presente era que el viento se volviera a levantar durante la madrugada. El intenso trabajo ha logrado dar sus frutos, y en estos momentos el fuego esta estabilizado, aunque 200 hectáreas han sido afectadas.

En la jornada nocturna se ha procedido a desalojar a unas cuarenta personas procedentes de una veintena de masías. Debido al incendio forestal, no han podido dormir en sus casas, cuatro fueron realojadas en un hostal de El Perelló y el resto han sido desplazadas a domicilios particulares propios, de familiares o amigos.

Los medios aéreos se han incorporado en las tareas para extinguir el incendio

Hace menos de una semana que se alertó por el alto riesgo de incendios forestales. Los consellers de Interior y Agricultura dieron el aviso, ya que el invierno largo y cálido, la escasez de lluvias preveían lo que se avecinaba.

Con la temporada recién empezada, y sumando las 140 hectáreas quemadas durante el año 2018, solamente El Perelló ha perdido 200 hectáreas de bosque y matojo en un incendio que ha sido ocasionado por una quema mal apagada de poda.

Origen del incendio forestal: una quema mal apagada

El propietario de la finca no tomo las medidas preventivas necesarias para evitar lo sucedido. Realizó una quema de ramas de olivos, y al parecer, no limpió suficientemente el terreno alrededor de la hoguera, el cual estaba demasiado cerca del bosque.

Los agentes denunciarán al propietario, ya que se fue sin asegurarse de que el fuego estaba bien apagado. Las brasas se quedaron ahí y las rachas de viento las levantó, dando lugar al incendio forestal que se ha producido.

El resultado de este gran incendio de la temporada, ha dejado unas 200 hectáreas afectadas.

El perímetro del fuego, que alcanzó los diez kilómetros, iba creciendo violentamente y los frentes se multiplicaron avivados por el viento, que fue cambiando de dirección.

Todas las alarmas saltaron minutos antes de las 12.00 am, y a las cuarenta dotaciones terrestres y ocho aéreas de los bomberos de la Generalitat, se sumaron a primera hora de la tarde dos hidroaviones de parte del Ministerio de Agricultura.