La inclusión continúa abriendo espacios en el deporte

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26/02/2020 - 12:26
Camino Álvarez y el CD Pingüinos son un ejemplo de inclusión

Lectura fácil

Camino Álvarez es una joven nadadora que se ha hecho hueco en la natación sincronizada. La joven está derribando barreras y nos enseña que luchar por un deporte cada vez más inclusivo es posible.

Álvarez es la primera nadadora federada en España con Síndrome de Down. Todo ello no le ha pasado factura para luchar por su verdadera pasión: la natación sincronizada.  Su entrenadora cuenta que Álvarez es la primera en llegar a los entrenamientos. Entrena antes de que llegue el resto del grupo y su entrega es muy grande desde hace tres años, el tiempo en el que comenzó a entrenar con el CD Pingüinos de Arrecife.

Camino Álvarez y el CD Pingüinos son un ejemplo de integración

Leticia Navarro, su entrenadora de Natación artística ha declarado que “un día le vio imitando a las niñas”. Habló con sus primas para que viniera a probar. “Al día siguiente apareció en clase muy puntual”. Camino entrena tres horas diarias porque ha reconocido que “el agua le relaja”.

Sus compañeras destacan lo integrada que está dentro del grupo y además harán todo lo posible para que Camino vaya a los Juegos Olímpicos para personas con Sindrome de Down que se celebran en 2024 en Turquía.

Beneficios de la natación

Camino Álvarez durante un ejercicio de sincro / Flickr
Camino Álvarez durante un ejercicio de sincro / Flickr

Uno de los beneficios que Camino percibe dentro del agua es la mejora de la motricidad. Además, el margen de movilidad en el agua es mucho mayor, por ello es un ejercicio muy recomendable para personas que quieren mejorar los movimientos de su cuerpo. También es un factor muy importante de cara a la salud mental. El ejercicio de hacer unos largos en la piscina durante unos minutos ayuda a aliviar las tensiones diarias, disminuye el aumento de tono muscular producido por el estrés, genera estados de ánimo positivos.

Nadar es un ejercicio en el que entrenas de manera global todos los músculos del cuerpo. También tiene los beneficios que equivalen a correr, hacer pesas y otros efectos que se visualizan en clases de danza y aerobic. Nadar también ayuda a mantener flexibles las articulaciones, especialmente el cuello, los hombros, y la pelvis.

Cada estilo favorece un grupo de músculos. Si vas a practicar las variedades de nado a espalda, crowl y braza involucrará a un mayor número de músculos: abdominales, bíceps y tríceps, glúteos, poplíteos, y cuadriceps. Por todos estos aspectos, la natación se considera un ejercicio global que hace que mejore la coordinación motora y se reduzca el riesgo de romperse los huesos.

Como en todos los deportes, es bueno comenzar con cautela para no fundirse el primer día. El progreso del ejercicio debe hacerse paso a paso. Si estás empezando a nadar una distancia determinada, los descansos deben rondar el medio minuto (treinta segundos) y el minuto. Cuando haya cierta soltura en los ejercicios y queramos ir a más, deberemos ver que el calentamiento es una fase muy importante para prevenir las posteriores lesiones.

El calentamiento debe durar entre cinco y diez minutos. Es una primera fase de activación donde hay que despertar los músculos que después van a ser puestos en marcha. A la fase de calentamiento le debe acompañar una etapa de veinte a cuarenta minutos de natación en diferentes estilos, para finalizar con un periodo de natación tranquilo que oscile entre los tres y cinco minutos donde veamos terminado el ejercicio.

¿Cada cuánto sería ideal hacer este tipo de rutina?

Lo ideal para practicar esta rutina sería entre tres y cinco días por semana. Si son tres lo conveniente es rotar los días. Por ejemplo combinar día sí y día no. Si son cinco días, lo importante aparte de cuidar la alimentación, será que esos dos días sean de reposo absoluto.

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