John Geddert ha sido encontrado muerto tras ser acusado de acoso sexual

John Geddert, entrenador olímpico de gimnasia en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 se suicidó tras ser acusado de 24 delitos de acoso sexual. El entrenador llevaba siendo investigado durante tres años a raíz de las acusaciones que vertieron contra él exgimnastas que declararon en el juicio del médico de las selecciones de gimnasia estadounidenses Larry Nassar. Las gimnastas le acusaron de conocer y permitir los abusos sexuales de Nassar en su gimnasio. Otras exgimnastas le atribuyeron malos tratos físicos y psicológicos, y dos de ellas también abusos sexuales.

Sin embargo, John Geddert nunca apareció a la cita del juicio: “Mi oficina ha sido notificada de que el cuerpo de John Geddert fue encontrado después de que se hubiera quitado la vida”, dijo Nessel en un comunicado. “Una manera trágica de terminar una trágica historia para todo el que estaba involucrado”

¿Qué ha opinado una de las gimnastas maltratadas por John Geddert?

Una de las gimnastas que ha sido maltratada por John Geddert es la campeona olímpica en Londres 2012, la gimnasta estadounidense Aly Raisman. Ella se desahogó a través de las redes sociales tras conocerse la muerte de Geddert: “Tengo el estómago revuelto. Pienso en los supervivientes que hay ahí fuera. Ojalá pudiera decir algo más para aliviar el dolor y el sufrimiento”.

Además en Río consiguió tres medallas más. En noviembre de 2017 desveló que había sido víctima de abusos sexuales por parte del médico Larry Nassar, que actualmente cumple condena en prisión. John Geddert se suicidó después de ser imputado con 24 cargos, entre ellos agresión sexual y tráfico de personas.

Raisman ha reclamado en ocasiones que estos tratos no quedaran impunes

Aly Raisman ha sido muy crítica con la Federación de gimnasia sobre las investigaciones. “Respectivamente, los delitos penales de los que han sido acusados incluyen conducta sexual criminal y chantaje, acoso infantil, destrucción de pruebas y asalto sexual. Para una organización que ha afirmado durante los últimos 15 años que 'la seguridad de los atletas es la prioridad número 1' es imposible imaginar un fracaso mayor”.

La voz de Raisman se ha unido a la de McKayla Maroney, plata en salto, y Simone Biles, ganadora de cuatro medallas en los Juegos de Río 2016, también fueron víctimas. Ellas siempre reclamaron una investigación profunda no solo en la Federación sino en el Comité Olímpico estadounidense por permitir y no impedir este tipo de abusos.