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Cerca de 30 millones de personas son ciegas, con discapacidad visual o baja visión en la Unión Europea. Muchos de estos afectados son jóvenes ciegos, de no más de 30 años. En España, el grupo de afectados comprendido en dichas edades se forman y toman conciencia de las iniciativas europeas en defensa de su realidad.
Proyectos como PARVIS (Promoting Awareness on the Rights of Visually Disabled People in an Inclusive Society) tienen como objetivo principal reclamar los derechos fundamentales de aquellas personas afectadas por la falta de visión, y otorgar a este gran grupo de ciudadanos aquello que les corresponde por ley, no pudiendo ser discriminados por su condición. Los jóvenes ciegos son el grupo que más está luchando por conseguir dichos derechos.
¿Qué es PARVIS? El proyecto en el que confían los jóvenes ciegos
Las siglas del proyecto PARVIS podrían definirse como 'el objetivo de concienciar sobre los derechos de las personas ciegas en una sociedad inclusiva'. La ONCE es una de las organizaciones que participa en dicho proyecto, ya que es miembro de la EBU (European Blind Union).
A pesar de que el proyecto cuenta con el apoyo de la Unión Europea, tan solo 9 países están involucrados directamente con el nuevo proyecto: Eslovaquia, Alemania, Montenegro, Francia, Lituania, Portugal, Holanda, Suecia y España.
Las actividades que se desarrollan dentro de PARVIS se centran en 10 derechos derivados de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD): derecho a una sanidad accesible; acceso a la información accesible; transporte accesible; acceso equitativo al mercado laboral; acceso equitativo a materiales culturales, dispositivos de asistencia y tecnologías accesibles; inclusión digital; voto accesible; vida independiente y educación inclusiva. En cuanto al mercado laboral o a la educación inclusiva, los jóvenes ciegos están luchando con mayor esfuerzo para que se consiga.
La falta de empatía, un grave problema
Tal y como declara Jesús Clemente, entrevistado por RTVE, tuvo que dejar de hacer lo que más le gustaba debido a la falta de apoyo. Él, como tantos otros jóvenes ciegos, adoraba practicar deporte, en especial el fútbol. Sin embargo, cuando la falta de visión le afectó por completo, la falta de soluciones le obligaron a dejar de lado su deporte favorito durante cinco años.
Como él mismo explica, sus compañeros de equipo y el entrenador se desentendieron de la situación, sin saber que había varias medidas disponibles para que una retirada prematura no se produjese.
"La falta de apoyo por parte de mi entrenador, sobre todo, me afectó mucho anímicamente", indica Jesús Clemente. Por este motivo, este joven español colabora en el proyecto para evitar que jóvenes ciegos como él pasen por la misma situación.
La vital importancia del proyecto
Así, tras lo expuesto anteriormente, la ceguera o falta de visión, ya sea parcial o total, afecta a 30 millones de personas en los países miembros de la Unión Europea. El grupo más numerosos de afectados lo constituyen jóvenes ciegos que no superan los 30 años de edad.
Lógicamente, entre tantos millones de personas hay multitud de casos diferentes, siendo un gran número de afectados personas con pocos recursos económicos y sociales. Por ello, la finalidad de este proyecto es de vital importancia, puesto que puede cambiar la vida de un gran número de personas en nuestro continente.
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