¿Qué recomiendan los psicólogos que le regalemos a los niños esta Navidad?

Los psicólogos recomiendan que esta Navidad le regalemos a los niños de la casa juguetes sencillos que promuevan la imaginación de los más pequeños y dejen de lado un poco las pantallas.

Recomiendan juguetes sencillos para promover la imaginación

Un juguete simple abre muchas posibilidades de uso “y promoverá más la imaginación que otros más estructurados”, ha afirmado la profesora de Psicología del Desarrollo de la Universitat Abat Oliba CEU, Clara Valls.

Por lo tanto, a pesar de que la pandemia ha hecho a los padres más permisivos en el uso de pantallas, les recomienda limitar la exposición de los menores a las mismas y que se conviertan en el “compañero de juego de sus hijos”. 

Valls ha remarcado que “los niños aprenden jugando” y a través del juego pueden adquirir todas las competencias que tienen que desarrollar: emocionales, comunicativas, motrices e, incluso, de razonamiento matemático o espacial. La sencillez del juguete es un valor en sí mismo porque deja el campo más abierto a la imaginación.

Mantener la dimensión educativa

Asimismo, la elección de un juguete como regalo de Navidad también tiene una dimensión educativa que conviene tener en cuenta. De hecho, en los últimos tiempos se ha generalizado el concepto de ‘juguete educativo’, en cuyo diseño ya se ha contemplado esta vertiente formativa del juego. Este tipo de juegos ha registrado una gran expansión con el auge de las tecnologías digitales. 

Según los expertos, el despliegue de las facultades imaginativas se ve favorecida cuando el niño “percibe que está en un entorno en el que se le permite expresarse, decidir qué material toma y cómo lo utiliza. Por este motivo, los juguetes que permiten muchas posibilidades de uso, promoverán más la imaginación”.

Sin embargo, no sucede de la misma manera con materiales “más estructurados, con funciones más definidas”, como sería el caso de juegos con botones que accionan sonidos y movimientos, ha subrayado Valls.

Las pantallas suelen atraer mucho a los niños

Por otro lado, las tecnologías bien empleadas permiten realizar juegos que estimulan aspectos muy positivos desde el punto de vista educativo, y cuentan con la ventaja de que las pantallas suelen atraer a los niños.

Pedro los padres deben estar muy atentos y administrar su uso. Hay que tener en cuenta que en los más pequeños “prima la necesidad de manipulación de los objetos para poder interiorizar los aprendizajes y que deberá limitarse la exposición a las pantallas por sus efectos negativos en el sueño de los niños”, ha advertido la especialista. 

Sabemos que en el contexto de la crisis del coronavirus, en el que se ha multiplicado el número de horas que los menores pasan en casa, los padres han tendido a ser más permisivos con el uso de pantallas.

Que los padres se conviertan en los mejores compañeros de juego

Igualmente, Valls recomienda a los padres que se sienten con sus hijos y se conviertan “en sus compañeros de juego, representando roles en sus imaginativas historias, ya sea con disfraces o muñecos”. En este juego simbólico, “los más pequeños (1,5 años - 5 años) podrán relajarse, expresarse y desarrollar sus habilidades sociales y su creatividad y, lo más importante, fortalecer el vínculo con sus padres”.

Sin duda, los juegos tradicionales ofrecen un terreno ideal para cubrir esta necesidad, ya que suelen aportar “todos los aprendizajes implícitos en la relación con los iguales: escucha, respeto, aceptación de las diferencias o resolución de conflictos”. Este factor social del juego también es, a su juicio, fundamental, ya que “al final, no importa tanto los juguetes o el juego sino tener a alguien con quien jugar”.