Kutxabank colabora con la repoblación de bosques

Este 2021 Kutxabank conseguirá replantar más de 83 hectáreas en los bosques que gestiona junto a Basoinsa y Asociación de Propietarios Forestales de Gipuzkoa.

Todo ellos están realizando una importante labor de repoblación en los montes de la zona, porque desde el 2020 más de 217 hectáreas fueron taladas.

Cabe destacar que esta repoblación de bosques se suma a la realizada durante 2020, año en el que se replantaron 87 hectáreas de estos bosques.

Kutxabank contribuye de forma muy activa con la reforestación en Gipuzkoa

Las labores de limpieza en los bosques gestionados por Kutxabank son otra de las importantes acciones que lleva realizando la entidad de forma anual.

En 2020 se limpiaron alrededor de 94 hectáreas, y el objetivo es limpiar 128 hectáreas en 2021. También se realizan labores para la conservación y el acondicionamiento de pistas.

Kutxabank gestiona una superficie total de 1.086,45 hectáreas de bosque, ubicadas en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, que da cabida a una amplia variedad de ecosistemas ricos en biodiversidad.

De toda la superficie gestionada, el banco es propietario de 971,72 hectáreas, de las cuales 932,86 hectáreas son bosques de explotación forestal maderera sostenible y 38,86 hectáreas están ocupadas por campas y montes cubiertos de vegetación autóctona, principalmente matorral, con la biodiversidad natural propia de los ecosistemas de cada zona.

Asimismo, un dato importante es que más del 80 % de los montes de Kutxabank se encuentran adscritos al sistema PEFC de gestión forestal sostenible.

La gestión de estos montes se lleva a cabo cumpliendo con los indicadores de Gestión Forestal Sostenible que se establecen en la Norma UNE 162.000. Aenor es la entidad certificadora que analiza el cumplimiento de los indicadores para lograr la acreditación.

Gestión forestal sostenible que da lugar a la absorción de los gases contaminantes de efecto invernadero

Deberíamos saber que los bosques actúan como sumidero de carbono, por lo que su destrucción no hace otra cosa que emporar los estragos causados por el cambio climático.

Las 971,72 hectáreas que son propiedad de Kutxabank cuentan con más de 570.000 árboles que absorben 13.656 toneladas de dióxido de carbono y compensan muy holgadamente las emisiones de la entidad, que en 2020 ha emitido 1.272 toneladas de CO2.

Kutxabank logró por tanto una ‘huella de carbono negativa’ de 12.384 toneladas durante el pasado ejercicio, ya que los recursos propios de la Entidad, absorbieron más dióxido de carbono del que se emitió a la atmósfera por el consumo de combustibles fósiles (gas natural y gasoil), electricidad y el transporte de las personas que forman parte de su plantilla.

De esta forma, Kutxabank demuestra como es posible tener un negocio sostenible y colaborar así con la protección y recuperación del entorno, realizando su labor diaria con una reducción de su huella medioambiental.