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Los incendios forestales quemaron 3.274,49 hectáreas de superficie arbolada durante el primer trimestre de este año en España, la tercera cifra más alta de la última década, según datos provisionales proporcionados por las comunidades autónomas al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
España es el país europeo que más sufre los efectos perniciosos del fuego. La falta de prevención es una de las claves que ha generado un peligroso aumento de incendios forestales, provocados por el ser humano en la mayoría de los casos.
Los bosques quemados son una terrible amenaza que en más de un 96 % de los casos en España está ocasionada por el ser humano.
No podemos bajar la guardia
Los datos, recogidos por Servimedia, indican que entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2021 se quemaron 13.399,15 hectáreas de superficie forestal, cuando la media de la década es de 17.935,95 hectáreas.
De ese total, 3.274,49 hectáreas corresponden a bosques quemados, cuando el promedio del decenio es de 2.171,34. El primer trimestre de este año es el tercero con mayor superficie arbolada calcinada por las llamas, solo por detrás de los de 2012 (9.310,64) y 2019 (4.713,66).
Entre enero y marzo se produjeron 1.416 siniestros forestales, de los que 563 fueron incendios (que arrasaron al menos una hectárea) y 852 conatos (con menos de una hectárea quemada). Cinco fueron grandes incendios forestales, una cifra sólo superada por los 10 de 2012.
La falta de prevención es un problema fundamental ante la aparición de nuevos bosques quemados
El noroeste peninsular (Asturias, Cantabria, Galicia, País Vasco y las provincias de León y Zamora) concentró el 52,01 % de los incendios y conatos forestales, mientras que el resto de los siniestros se repartieron entre las comunidades interiores peninsulares (las provincias de las regiones no costeras, salvo León y Zamora), con un 33,00 %; el área mediterránea, con un 14,84 %, y Canarias, con un 0,14 %.
La falta de prevención junto con el abandono rural y otras dificultades estructurales, ha generado un aumento de incendios forestales altamente peligroso, no solo para la biodiversidad, sino también para la seguridad de la población. Además, la mayor frecuencia e intensidad de las olas de calor y el aumento de las temperaturas contribuye a una mayor frecuencia e intensidad de incendios forestales.
España es el país de la Unión Europea más afectado por los incendios forestales. Otros países del ámbito mediterráneo como Portugal, Grecia, el sur de Francia o Italia también los sufren especialmente. A pesar de este problema de primer orden, no existe una política forestal comunitaria.
¿Qué soluciones hay?
Es vital mejorar la gestión forestal preventiva. Hay que reducir la cantidad de biomasa (con la recogida de leña, una producción sostenible de energía, etc.), siempre teniendo en cuenta el funcionamiento de los ecosistemas y la necesidad de respetar la diversidad estructural del bosque, etc.
Greenpeace apunta que resulta fundamental desarrollar modelos selvícolas (es decir, de gestión de las masas forestales) que tengan en cuenta el cambio climático y que, además de imitar al máximo el funcionamiento de la naturaleza, favorezcan la diversidad genética y específica y reduzcan la densidad de arbolado. Así nuestros bosques serán menos vulnerables a los incendios, plagas, enfermedades como la seca, etc.
¿Qué puedes hacer tú?
Para evitar los incendios sigue los siguientes consejos:
- Si observas un incendio forestal o una columna de humo, avisa a las personas que viven cerca y comunícalo al teléfono 112.
- Si se haces fuego en lugares autorizados asegúrate de que al marcharte queda apagado con agua y tierra y no abandones los rescoldos hasta que dejen de humear.
- En caso de condiciones meteorológicas que favorezcan la propagación de incendios, no hagas fuego.
- No conduzcas a través del humo.
En caso de encontrarte en un incendio, ten en cuenta:
- Observa la dirección del fuego.
- La ropa te protegerá.
- Respira con un pañuelo húmedo tapando boca y nariz.
- Vigila el viento, un cambio puede hacer que el fuego le rodee, ve siempre en sentido contrario.
- Trata de ir a las zonas más desprovistas de vegetación.
- No huyas del fuego ladera arriba, es mejor pasar por los flancos o zonas ya quemadas no huya hacia barrancos, hondonadas o agujeros, procura quedarte junto a cortafuegos o barreras naturales (río, carreteras).
- Si el fuego te rodea sitúate en tierra ya quemada.
- Conserva la calma y obedece las instrucciones de los agentes forestales o de protección civil.
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