¿Qué es la lipodistrofia?

Nuestro sistema endocrino es uno de los más enigmáticos y complejos de nuestro cuerpo. Esa complejidad conlleva que muchas enfermedades lleguen a tener diversos efectos y muy importantes en la vida de los pacientes. Un claro ejemplo es la lipodistrofia, esta es una enfermedad que poseen un elevado número de personas, en su mayoría con VIH.

Pero... ¿qué es la lipodistrofia?

La lipodistrofia es un término médico que consiste en diferentes alteraciones en la distribución del tejido adiposo es decir, la distribución de la grasa corporal. Estas anomalías pueden consistir en la ausencia del mismo (lipoatrofia), en la acumulación (lipohipertrofia) o en una combinación de ambas, según la zona del cuerpo.

En función del grado de pérdida de tejido adiposo se determina la gravedad de las complicaciones metabólicas, pudiéndose diferenciar variedad localizada (zona pequeñas), variedad parcial (extremidades) y variedad generalizada (casi todo el cuerpo).

En casos generales, cuando forma parte de un conjunto de síntomas relacionados con el tratamiento anti-VIH, está vinculada con otros cambios metabólicos en tu organismo.

Las causas pueden ser variadas. Algunas formas son hereditarias, mientras que otras se deben a la presencia de determinados tóxicos como algunos medicamentos antirretrovirales o la insulina.

Síntomas de la lipodistrofia

La lipodistrofia puede ocasionar diferentes síntomas, siendo estos dos los principales:

• Cambios físicos derivados de la distribución anómala de tejido adiposo.
• Síntomas de carácter metabólico.

Por ese motivo, la lipoatrofia causa la pérdida de volumen en la parte afectada, marcando los huesos y llegando a aparentar un caso de desnutrición. En el caso contrario, nos encontramos con la lipohipertrofia, esta supone una acumulación de grasa, lo que ocasiona que en diferentes zonas aumenten de tamaño y se puedan formar pliegues.

Por otra parte, en otras ocasiones, se elevan en la sangre el colesterol, los triglicéridos y otras grasas, que incluso, pueden acumularse en diferentes órganos provocando daños como por ejemplo en el páncreas, en los riñones, en el hígado, etc. Esto es lo que identificamos como complicaciones, llamadas hígado graso, pancreatitis y accidentes cerebrovasculares.

Además, es bastante habitual que los pacientes que padecen lipodistrofia desarrollen diabetes mellitus de tipo 2, ovario poliquístico y, en algunas ocasiones, enfermedad renal crónica.

El tratamiento de la lipodistrofia

Pero... ¿cómo se trata la lipodistrofia?, esta es la pregunta que todos nos hacemos cuando conocemos un poco mejor este tipo de enfermedad. El tratamiento al que los pacientes se enfrentan es complejo, ya que se centra en abordar sus diferentes afectaciones y en parte, depende de la causa por la que posee mencionado trastorno.

Así, por tanto, comprende desde procedimientos de cirugía plástica a la administración de estatinas y fibratos para hacer descender los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, pasando por el ajuste del tratamiento antirretroviral si lo hay, el control de las glucemias o la administración de hormona del crecimiento.