Los accionistas de la brasileña Embraer aprueban la fusión con Boeing

Sao Paulo, 26 feb (EFE).- Los accionistas del fabricante brasileño de aviones Embraer aprobaron este martes en Asamblea General Extraordinaria la venta del control de su división comercial a la estadounidense Boeing para la creación de una nueva empresa, informó la compañía.

En la reunión en la sede de la empresa, en la que participaron representantes de los propietarios del 67 % de las acciones en circulación de Embraer, la fusión fue aprobada por el 96,8 % de los votos válidos, según un comunicado de la aeronáutica.

El visto bueno de los accionistas del tercer mayor fabricante de aviones del mundo y líder en el segmento de aviones para vuelos regionales es una de las últimas etapas en el proceso de creación de una compañía aeronáutica valorada en 5.260 millones de dólares.

Por el acuerdo entre ambas compañías, Embraer vende el 80 % de su división de aviones comerciales por 4.200 millones de dólares a Boeing, que tendrá el total control de la nueva sociedad. La brasileña se quedará con el 20 % restante de la compañía naciente.

El negocio ya recibió la aprobación del Gobierno brasileño, que tiene poder de veto sobre todas las operaciones de Embraer, y también ya había sido aprobado por el Consejo de Administración de la brasileña, por lo que ahora sólo depende de los organismos reguladores.

La previsión de la dirección de Embraer es que todo el proceso sea concluido a finales de este año.

En otro acuerdo igualmente aprobado este martes por los accionistas, Embraer y Boeing crearon una asociación de riesgo compartido para desarrollar y comercializar conjuntamente el avión brasileño de carga militar KC-390, a través de una segunda compañía dedicada a la promoción y desarrollo de nuevos mercados en el área de defensa.

"Bajo los términos de la asociación propuesta, Embraer tendrá el 51 % de las acciones de la asociación de riesgo compartido y Boeing el 49 % restante", según el comunicado.

Los negocios de Embraer para aeronaves militares y aviones ejecutivos permanecerán bajo control de la brasileña e independientes.

Según analistas, el acuerdo entre ambas empresas busca contrarrestar de alguna forma la asociación entre la canadiense Bombardier y el gigante aeronáutico europeo Airbus.

"Esta importante asociación posicionará las dos empresas para ofrecer una propuesta de valor más robusta a nuestros clientes e inversores, además de crear más oportunidades para nuestros empleados", afirmó Paulo Cesar de Souza e Silva, presidente y CEO de Embraer, citado en el comunicado.

"Nuestro acuerdo creará beneficios mutuos y aumentará la competitividad tanto de Embraer como de Boeing", agregó.

Para el presidente y CEO de Boeing, Dennis Muilenburg, la aprobación de los accionistas "es un paso importante en el proceso de acercar estas dos grandes empresas aeroespaciales".

"Esta asociación global estratégica tiene como base un largo histórico de colaboración, beneficia a los clientes y acelera nuestro crecimiento", indicó.

Tras llegar a la Presidencia de Brasil, el 1 de enero, el ultraderechista Jair Bolsonaro llegó a expresar algunas dudas sobre el acuerdo entre ambas firmas, pero el 10 de enero anunció que no vetaría la asociación al considerar "preservados" los intereses de la Nación.

La alianza necesitaba de este aval ya que el Gobierno ostenta una "acción dorada" con derecho a veto que se guardó cuando en 1994 privatizó Embraer.

El Gobierno asegura que ambas compañías se comprometieron a mantener los actuales empleos en Brasil, pero los sindicatos denuncian que el acuerdo "pone el riesgo los puestos de trabajo y la soberanía tecnológica" del país.

La asamblea de accionistas de este martes se realizó precisamente luego de que un tribunal de segunda instancia anulara una cautelar con la que un juez, a pedido de los sindicatos, intentó suspender la votación.

El sindicato convocó para este mismo martes una manifestación en las puertas de la fábrica para protestar contra el acuerdo.