23/01/2025 - 16:00
Lectura fácil
En 2024, Humana Fundación Pueblo para Pueblo logró recuperar cerca de 19.074 toneladas de textiles usados, lo que equivale a más de 77 millones de prendas. Este hito representa un incremento del 6,3% en comparación con el año anterior, cuando la organización gestionó 17.946 toneladas. La cifra, reflejada en un comunicado reciente de la entidad, subraya el impacto positivo de los contenedores de recogida selectiva, que permitieron dar una nueva vida a una gran parte de estas prendas.
Según los datos presentados, el 63% de los textiles recolectados fueron reutilizados, mientras que el 28% se destinó al reciclaje. Esto implica que más del 90% de la ropa recogida por Humana evitó convertirse en residuo, prolongando su utilidad y contribuyendo así a la sostenibilidad. Sin embargo, el panorama en España todavía deja margen de mejora: la organización destacó que, aunque no existen cifras oficiales, se calcula que solo el 12% de los textiles desechados se recuperan de manera selectiva, un porcentaje significativamente inferior al promedio europeo del 38%.
La realidad del consumo textil en España
Rafael Mas, director de Proyectos y Relaciones Externas de la fundación, explicó que cada ciudadano en España consume alrededor de 25 kilos de textiles al año y desecha cerca de 22. De estos, el 90% no se deposita en contenedores de recogida de textiles, sino en puntos no adecuados, lo que subraya la necesidad de reforzar las infraestructuras de reciclaje y la concienciación ciudadana.
El impacto ambiental de la recuperación de textiles es notable. Según los cálculos de Humana, las 19.074 toneladas de ropa recuperadas en 2024 evitaron la emisión de 116.354 toneladas de dióxido de carbono (CO₂). Además, la actividad genera un puesto de trabajo por cada 25 toneladas de textil recogido, lo que refuerza la dimensión social de este modelo de gestión sostenible.
El destino de los recursos obtenidos
Los fondos generados a través de la gestión de textiles usados se destinan principalmente a proyectos de desarrollo en países del Sur. Entre las iniciativas destacadas figuran la formación de profesores de primaria, la promoción de la agricultura sostenible y programas de lucha contra enfermedades como el VIH/Sida y la tuberculosis. Estas acciones se llevan a cabo en colaboración con socios locales, lo que asegura que los recursos tengan un impacto directo y positivo en las comunidades beneficiadas.
Una coyuntura clave para el textil sostenible
La fundación también señaló que el sector textil está en un punto de inflexión, impulsado por nuevas normativas y estrategias europeas como la Estrategia para Textiles Circulares y Sostenibles de la Unión Europea y la Ley 7/2022 en España. Estas medidas incluyen la obligatoriedad de la recogida selectiva de textiles, la prohibición de destruir excedentes no vendidos y la implementación de la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP). Este último mecanismo busca que los productores asuman la responsabilidad completa del ciclo de vida de sus productos, fomentando una gestión más sostenible de los residuos textiles.
El trabajo de Humana no solo responde a esta creciente sensibilidad hacia la sostenibilidad en la moda, sino que también demuestra cómo una gestión eficaz de los recursos puede generar beneficios ambientales, sociales y económicos. Aunque queda mucho por hacer para alcanzar los niveles europeos de recuperación textil, los avances logrados en 2024 reflejan un camino prometedor hacia un futuro más sostenible.
Añadir nuevo comentario