Cómo aplicar la "regla de los 5 pasos" recomendada por el Banco de España para comprobar las monedas falsas

El Banco de España ha recomendado una técnica conocida como la "regla de los 5 pasos" para asegurarse de que las monedas entregadas como cambio son legítimas y no falsas. Esta técnica es fácil de seguir y puede ayudar a protegerse contra la circulación de muchas que son falsas.

Las monedas falsas son muy comunes en el mercado

La aparición de dinero falso en el mercado es un problema que puede afectar tanto a los consumidores como al sistema financiero en su conjunto. Las monedas falsas, al no tener un valor real, pueden dañar la economía y poner en riesgo la estabilidad financiera de un país.

Por eso, el Banco de España recomienda a los ciudadanos la "regla de los cinco pasos" para comprobar la autenticidad de cualquier moneda. Es una herramienta sencilla y eficaz para prevenirlo.

La “regla de los 5 pasos” del Banco de España para evitar estafas

Cuando se trata de hacer pagos en efectivo en tiendas y recibir vueltas, es importante comprobar que las monedas sean auténticas y estén en buen estado. Para ayudar en esta tarea, el Banco de España ha publicado un artículo en el que aconseja poner en práctica lo que denomina "la regla de los cinco pasos", que consiste en cinco puntos clave.

En primer lugar, es importante comprobar que la moneda es de euro y no de un país no perteneciente al eurosistema. Todos los euros tienen en una de sus caras el número con el valor de la moneda y la palabra euro o eurocent y el mapa de Europa. En la otra cara aparecen en el centro el año de acuñación y una imagen que identifica al país emisor rodeados por las 12 estrellas de la bandera europea en la parte externa de la moneda.

En segundo lugar, se recomienda sostener la moneda entre dos dedos y girarla sobre sí misma para comprobar que las imágenes de ambas caras estén correctamente alineadas en sentido vertical, lo que se conoce como "giro moneda".

El tercer punto es la concordancia. El diseño del mapa de Europa de la cara común cambió ligeramente a partir de 2007 para incluir a todo el continente europeo y no solo a los países de la UE, como en el diseño inicial.

Por lo tanto, si una moneda tiene un año de acuñación posterior a 2007, se debe buscar el mapa de Europa completo en la cara común. El año de acuñación se encuentra en la cara nacional.

El cuarto paso es la prueba de magnetismo. Las monedas de uno y dos euros son ligeramente magnéticas, pero solo en el centro. Cualquier imán pequeño servirá para comprobarlo: la moneda deberá pegarse, pero con una ligera sacudida deberá despegarse del imán.

En cuanto a las de uno, dos y cinco céntimos son fuertemente magnéticas y no se despegan del imán, mientras que las de 10, 20 y 50 céntimos no son magnéticas en absoluto.

Por último, se aconseja mirar con atención el mapa de Europa en las monedas de uno y dos euros. Este deberá tener la superficie parcialmente rugosa, nunca lisa.

Siguiendo estos cinco pasos, cualquier persona puede comprobar la autenticidad al hacer un pago en efectivo en una tienda, bar o restaurante. El Banco de España señala que es importante realizar estas comprobaciones para evitar el riesgo de recibir monedas falsas o dañadas.