¿Conoces la historia de Papá Noel?

Escuché de Raúl Vidar, micólogo de sierra de Guadarrama, que la razón de que Papá Noel entre por una chimenea se remonta a una tradición finlandesa, según la cual antiguamente las puertas de las casas laponas estaban en el tejado debido a que en invierno la nieve colapsaba la puerta delantera. Algo parecido sucede en algunas culturas africanas, por la arena del desierto que tapa el acceso principal.

Habrá, sin duda, muchas historias sobre Papá Noel, pues sus orígenes se remontan al siglo III. Son muchos años para que la tradición oral haya cambiado lo que pudo ser el mito original, y su tradición se ha arraigado de forma distinta en las diferentes culturas.

La verdadera historia de Papá Noel

La historia relata que Nicolás de Bari, el que luego sería San Nicolás, nació en el siglo III en Patara, una ciudad del distrito de Licia, dentro de una familia acomodada en la actual Turquía.

Desde muy pequeño destacó por su bondad y generosidad con los más pobres. Siendo todavía muy joven perdió a sus padres debido a una epidemia de peste, por desgracia muy comunes antiguamente. Así, se convirtió en heredero de una gran fortuna. A los 19 años decidió donarla a los más necesitados y marcharse a Mira con su tío para ser sacerdote.

Más tarde fue nombrado obispo y se convirtió en santo patrón de Turquía, Grecia y Rusia. Alrededor de su figura existen numerosos milagros, como sucede por ejemplo con San Isidro, patrón de Madrid. Una de ellas es que tres sentenciados a muerte pidieron que Nicolás los salvara. La noche anterior a ser ejecutados, el emperador Constantino soñó con Nicolás y liberó a los reos. Nicolás murió el 6 de diciembre entre los años 345 y 352, cerca de la Navidad, lo que motivó a que se convirtiera en el mito del barbudo bonachón que reparte regalos por estas fechas. La historia relata que el obispo entraba por una ventana y colocaba una bolsa de oro dentro de los calcetines que estaban colgados encima de la chimenea.

¿Santa Claus o Papá Noel?

La imagen de Santa Claus llegó a Estados Unidos procedente de Holanda en el siglo XVII y fue en 1809 cuando Washington Irving, autor de 'Cuentos de la Alhambra', cambió el nombre del santo holandés Sinterklaas al pronunciar Santa Claus.

Más tarde, en los años 60, el poeta Clement Clarke Moore describió al personaje como un enano delgado que regalaba juguetes a los niños y viajaba en un trineo tirado por nueve renos, cuyo líder se llamaba Rodolfo (Rudolph, el de la nariz roja). Gracias a un ilustrador su imagen empezó a utilizarse para las campañas de Navidad.

El nombre más popular en los países de habla hispana es Papá Noel, cuya denominación viene de Francia, ya que allí la Navidad significa noël y comenzaron a llamar a Santa Claus Pere Noël, el padre de la Navidad. En España se hizo popular el nombre Papá Noel y de ahí su predominio en nuestro país y en América Latina.

Una empresa estadounidense del sector frigorífico acuñó la creencia de que Papá Noel venía del Polo Norte a finales del siglo XIX. Ya en 1930, la marca Coca-Cola adquirió los derechos de este personaje y lo comenzó a utilizar en sus anuncios.