El paro juvenil está en máximos históricos

El paro juvenil está en máximos históricos y una de cada cuatro personas entre los 20 y los 30 años está en riesgo de exclusión social, según los últimos datos. Los jóvenes españoles sufren el desempleo, el empleo precario, temporal e inestable, y un horizonte de expectativas y condiciones materiales cada vez peores.

El 32 % de los veinteañeros está en riesgo de pobreza y exclusión social

Este es el desesperanzador diagnóstico que empieza a desprenderse de las cifras oficiales. España es un país más rico, modernizado y próspero que hace décadas, pero esto no parece reflejarse en la situación que afronta una buena parte de la juventud española.

Los datos reflejan que el suelo laboral que pisan los jóvenes se está rompiendo a marchas forzadas. Las cifras de temporalidad se han disparado y las de paro no descienden. El 30 % de jóvenes españoles están en situación de desempleo, cifra que solo superan Grecia, Macedonia y Montenegro.

A diferencia territorios tradicionalmente más prósperos como los países nórdicos, Francia o Inglaterra, España está a la cola en inserción juvenil. Por ello, la Unión Europea ya ha llamado la atención a nuestro país varias veces para que intente darle solución a este problema.

Sus ingresos netos no superan los 10.000 euros

¿Por qué están en esta situación los veinteañeros españoles? En primer lugar, por la precariedad del empleo de alta rotación en la restauración y los servicios personales. En segundo lugar, por los ingresos netos que no superan los 10.000 euros anuales. En definitiva, por un reparto de las rentas y las posibilidades emancipatorias tan desiguales.

Por su parte, el Delegado de Familias, Igualdad y Bienestar social del gobierno de la Comunidad de Madrid, Pepe Aiforte, ha afirmado que, en relación a los datos solo para esta comunidad, que hay ingresos muy bajos y riesgo de pobreza para el 32 % de los jóvenes madrileños entre 16 y 29 años, y del 33,3 % para los de una edad comprendida entre 30 y 44 años.

Este dato desciende sensiblemente para las personas mayores de 50 años (del 30 % de personas mayores con ingresos que no superan el SMI se ha pasado al 15 % en una década). Por lo tanto, queda latente que el origen de este descenso en las expectativas laborales y vitales de la juventud da comienzo en 2010, con el advenimiento de la crisis.

Lo tienen muy complicado para emanciparse

Las condiciones materiales de la juventud española no auguran una mejora de sus expectativas, según ha apuntado Eurostat. Asimismo, los jóvenes lo siguen teniendo muy complicado para emanciparse. Las cifras de emancipación han bajado más de un 15 % en la última década. Si ya entonces más de la mitad de los jóvenes vivía con sus padres, en la actualidad este porcentaje llega al 65 %.

Los jóvenes ya confirmaron en las encuestas realizadas por el Injuve en 2019 que les resulta imposible emanciparse, encontrar una vivienda asequible (un alquiler que no supere el 30 % de sus ingresos) y viven peor que sus padres.