La curiosa patología por la que Van Gogh pintaba así de amarrillos sus cuadros

Probablemente la obra de Vincent Van Gogh sea una de las más reconocidas a nivel mundial. Sus girasoles, su noche estrella, sus campos de trigo...La belleza de sus obras y la habilidad única de su trazo, se complementan con una paleta de colores que invita a que te tomes un tiempo a prestar atención. De esta paleta destaca sin lugar a dudas la gama de amarillo tan peculiar que el pintor utiliza en sus obras.

Pero no es lo único que destaca de Van Gogh. También, y por desgracia, lo hizo su deterioro en cuanto a salud mental, que finalmente lo llevó a cortarse una oreja, convirtiendo en esta en una de las anécdotas más conocidas de la historia del arte. Ahora los expertos han querido dar un paso más allá intentando conectar el uso de sus particulares tonalidades de amarillo con una patología provocada por la intoxicación de una sustancia conocida como 'digitalis purpurea'.

El amarillo de Van Gogh podría deberse a una patología

Cuando vemos un cuadro de Van Gogh es muy difícil no encontrarnos algún tipo de tonalidad de amarillo. Quizá los que más se salvan son sus primeras creaciones. Pero en sus reconocidas y grandes obras como 'Los girasoles', 'La noche estrellada' o 'La casa amarilla', muestran una predominancia de unas tonalidades de amarillo poco comunes y muy abundantes en toda la composición. Como cualquier pintor de su época, Vincent hacía uso de los materiales que tenía a su alcance, y en aquel momento, las tonalidades del amarillo se conseguían a través de cromo.

Si Van Gogh utilizaba los mismos materiales que el resto de sus coetáneos ¿Cómo conseguía expresar el amarillo de una forma tan particular? En un reportaje de la revista 'National Geographic', se presenta la posibilidad de que esta maestría del pintor viniese dada por una patología conocida como xantopsia, enfermedad que generaba una alteración en la percepción de los colores, lo que haría que el artista observase su obra de una manera completamente diferente a la que lo hacen personas que no sufren de este trastorno.

La 'Digitalis purpurea'

Se llega a la conclusión de que esto podría haber sido lo que le ocurrió a Vincent Van Gogh, ya que el pintor consumía de forma habitual, y bajo la prescripción médica de aquella época, una sustancia conocida como 'digitalis purpurea'. Esta sustancia se utilizaba en aquel momento principalmente para tratar crisis maniacodepresivas, de las que sabemos que el artista llegó a sufrir durante el periodo de la creación de muchas de sus obras maestras.

Se cree que un consumo excesivo pudo llevar al pintor a una intoxicación de esta sustancia y que esta fue la causante de que acabase desarrollando la xantopsia. " Vicent van Gogh veía el mundo a través de un filtro amarillo provocado por la medicina que consumía", comentan en el reportaje. Sea como fuere, lo cierto es que las obras de este artista marcaron la historia del arte por su belleza y sí, por su tono amarillo especial.