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Las personas con discapacidad son uno de los grupos más vulnerables durante el Covid – 19. Generalmente, este grupo de población suele desempeñar trabajos de poca cualificación que, durante los últimos 2 años no han podido salir tras la pandemia de Covid – 19. Los datos del SEPE han destacado que la contratación de las personas de discapacidad ha caído en torno a un 4 %.
Además, hay que destacar que, el 65 % de las personas con discapacidad desempleadas no encontrará trabajo en 2022. Estos son datos del informe Discapacidad y expectativas para el nuevo año de la Fundación Adecco y CHM Obras e Infraestructuras.
¿Qué diferencias hay entre la contratación de personas con discapacidad entre 2020 y 2021?
La contratación de las personas con discapacidad cayó en 2020 en un 26 %. En 2021, esta tendencia se ha recuperado con un + 32 %. Recordemos que la contratación de personas con discapacidad había cogido velocidad de crucero y llevaba una trayectoria alcista de 7 años.
Los datos del SEPE han revertido la tendencia en 2020. Pese a que se alcanzó el máximo en 2019 con más de 80.000 contratos en el mes de septiembre. En concreto, entre enero y noviembre de 2021 las personas con discapacidad han firmado 105.106 contratos.
Las personas con discapacidad tienen participación apenas en la empresa privada
La tasa de actividad de las personas con discapacidad se encuentra en el 34,3 %. Eso quiere decir que más de un 60 % ni busca trabajo ni lo tiene. También llama la atención la escasa penetración de las personas con discapacidad en la empresa ordinaria, es decir, en entornos de trabajo normalizados.
Actualmente, más de tres cuartas partes de los contratos a personas con discapacidad (75 %) se suscriben en el ámbito protegido (Centros Especiales de Empleo), una cifra que supera en más de 10 puntos porcentuales a la de hace una década (64 %).
¿Qué ocurrirá de cara al 2022?
La mayoría de las personas con discapacidad desconfía del mercado laboral del año que viene. Fenómenos como la digitalización, la automatización de puestos de trabajo, la crisis que aún afecta a muchas empresas o los requisitos cada vez más exigentes de las ofertas de empleo, dificultarán a las personas con discapacidad competir en el mercado del año venidero.
Además, las personas con discapacidad piden que no se les juzgue con tanta facilidades. Respuestas como “que no me miren raro” o “que no me digan que tengo una enfermedad” son algunas de las respuestas destacadas en este sentido. La vivienda se sitúa en tercer lugar: un 80,5 % considera básico conseguir una residencia donde ser independiente, seguido de un 79,4 % que alude a las relaciones afectivas.
La Fundación Adecco ha destacado que hasta el año 2242 (s. XXIII) no se alcanzará la plena inclusión. La mayor parte de los encuestados (46,8 %), suscribe esta idea y cree se trata de un anhelo que las generaciones presentes no llegaremos a ver.
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