Luz verde al plan de respuesta a las consecuencias de la guerra

El Gobierno lleva más de dos semanas prometiendo una serie de ayudas como respuesta a las consecuencias de la guerra que podrían efectuarse esta semana.

Las medidas que estudia el Ejecutivo son los cheques para familias destinados a pagos de facturas de gas o luz y bonificaciones al transporte por carretera para ayudar a los camioneros a llenar los tanques de combustible.

Las ayudas como respuesta a las consecuencias de la guerra podrían llegar a las empresas y a todos los ciudadanos

Esas consecuencias de la guerra como ya bien sabemos son, principalmente, el desmesurado incremento de los precios de la energía (véase gas, petróleo y electricidad) y el debate en el seno del Consejo de Ministros esta semana se centra en la forma y la cuantía que tendrán finalmente las ayudas que se prevén para que familias y consumidores puedan enfrentar mejor el pago de servicios esenciales como la luz. 

El ministro de Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, ha destacado que las ayudas podrían llegar a todo el mundo. En concreto, ha anunciado hace días que las medidas que se aprobarán durante este Consejo de Ministros habrá medidas importantes, inmediatas y que van a tener como finalidad proteger a todos.

Una de las medidas más polémicas que el Gobierno ha querido sacar es la ayuda directa a través del acuerdo del Ministerio de Transportes con parte del sector. La ayuda rata de rebajar 20 céntimos por litro a los transportistas hasta el 30 de junio, ayuda que ascenderá a más de 1.050 millones de euros.

Cada camión podrá ahorrar unos 700 euros al mes

Los cálculos del Gobierno apuntan a un ahorro mensual de unos 700 euros por camión que funcione con gasóleo y también se concederán otros 450 millones de euros en ayudas directas a las consecuencias de la guerra.

Otro de los sectores afectados es el sector pesquero. El ministro Luis Planas ha adelantado que se acelerará el pago de ayudas con fondos de la UE, algo que confirmó días después la Comisión Europea.

Unidas Podemos ha propuesto una ayuda para los alquileres de 300 euros y la congelación de los mismos

Dejando de lado las consecuencias de la guerra, la parte del Gobierno que está representado por Unidas Podemos ha propuesto un cheque de 300 euros para familias acogidas al mercado regulado (PVPC), la ampliación del bono social para aumentar a los beneficiarios y regulación del principio de precaución para frenar los cortes de suministros a personas en situación de vulnerabilidad.

Además, en medida de vivienda, la fuerza política morada ha apostado por la congelación de la actualización de las rentas del alquiler durante 2022 y la prórroga del decreto anti desahucios de 2020 mientras dure esta situación. Además, el Ejecutivo ha apostado por incrementar la cantidad del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y los umbrales de renta de acceso.

Lo que el Gobierno no está dispuesto a hacer es bajar los impuestos

Todas estas medidas destinadas a paliar las consecuencias de la guerra que se aprueben tendrán en cuenta la decisión adoptada el pasado viernes en el Consejo Europeo que abordó los altos precios de la energía derivados de la guerra en Ucrania y la dependencia del gas ruso. En esa Cumbre, los Veintisiete reconocieron a España y Portugal un "trato especial" para gestionar los elevados precios de la electricidad por su bajo nivel de interconexión con el resto del bloque. Sin embargo, las políticas que tomen ambos países para tratar de limitar el precio del gas con el fin de rebajar el de la electricidad no se empezarán a aplicar de forma inmediata, ya que la Comisión Europea tiene aún que validarlas, aunque se ha comprometido a hacerlo de forma "urgente".

El Gobierno no está dispuesto a bajar los impuestos. El Ejecutivo de Pedro Sánchez se ha colocado en principio en contra a las fuerzas políticas de derecha como PP, Vox y Ciudadanos. La responsable económica del Gobierno de Pedro Sánchez, Nadia Calviño, ha señalado que no se pueden bajar los impuestos con respecto a la electricidad ya que, España tiene los tipos más bajos de la UE.

Finalmente, la vía elegida, por tanto, para solventar las consecuencias de la guerra, parece más la de subvencionar ayudas directas.