Rohaní intenta calmar a la población tras una inusual huelga en el bazar de Teherán

Teherán, 26 jun (EFE).- El presidente iraní, Hasan Rohaní, prometió hoy a los iraníes que sus necesidades básicas están cubiertas pese a la fuerte devaluación de la moneda local, en un llamamiento a la calma tras la inusual huelga en el Gran Bazar de Teherán.

La caída de la moneda iraní, que hace un año se cambiaba a 40.000 riales un dólar y alcanzó esta semana los 90.000, ha provocado protestas contra la política económica del Gobierno y el cierre ayer del bazar, que hoy continuó parcialmente.

"En ninguna situación, incluso en la peor que quieran crearnos los enemigos (aludiendo a EEUU), la gente no tendrá problemas con sus necesidades esenciales, incluida la comida", subrayó Rohaní en un discurso, recogido por la web de la Presidencia.

El mandatario explicó que "muchos productos básicos, como el trigo, el aceite y el azúcar, se producen a nivel interno o se han importado y almacenado de modo suficiente".

Rohaní criticó la depreciación del rial en el mercado libre -a nivel oficial se ha fijado otro valor- y garantizó que "para el suministro de las necesidades cotidianas se dedicará la suficiente divisa oficial".

"¿Por qué la gente esta preocupada por el futuro?, ¿ha disminuido la mercancía en el bazar?, ¿ha disminuido nuestra ganancia en divisas y en dólares?", preguntó el presidente.

También hizo referencia a las sanciones impuestas por el presidente de EEUU, Donald Trump, tras su retirada el pasado 8 de mayo del acuerdo nuclear de 2015, que comienzan a aplicare el próximo agosto y amenazan con hundir aún más la económica iraní.

"EEUU quiere derrumbar nuestra nación con una guerra psicológica y económica", denunció Rohaní, quien garantizó que el Gobierno iraní podrá superar estos obstáculos.

No obstante, un tendero del Gran Bazar de Teherán dijo a Efe que el mercado sigue hoy "medio cerrado" y que él y otros comerciantes clausuraron antes sus negocios después de que se reanudaran las protestas.

Las protestas de ayer se extendieron del bazar a otras zonas de Teherán, llevando a la policía a lanzar gases lacrimógenos en algunas zonas para dispersar a los manifestantes, que incendiaron por su parte contenedores de basura.

El fiscal general de Teherán, Abás Yafarí Dolatabadí, indicó hoy que han sido arrestados los instigadores de estos disturbios, aunque no dio una cifra de detenidos y aseguró que los "bazaríes" no están en contra del sistema.

Las autoridades han tomado en los últimos días una serie de medidas como prohibir la importación de más de 1.300 productos, y crear un mercado secundario de divisa.

La delicada situación financiera ha provocado en los últimos meses amplias y sin precedentes huelgas de diferentes gremios, mientras que a finales de diciembre pasado hubo manifestaciones antigubernamentales en todo Irán que derivaron en fuertes críticas contra el propio sistema de la República Islámica.