Rosalía conquista Madrid con 'El mal querer'

Rosalía se ha convertido en la cara del panorama musical de este 2019. Este martes, con su lazo rojo sanguíneo, lacró una de las páginas más honrosas de nuestra historia musical reciente.

Cierra un año de éxito mundial

La cantante catalana llegó a Madrid tras agotar en dos horas las entradas de su concierto, que sucede a su enorme éxito en Barcelona.

La actuación de ayer se podría definir como su debut en el multitudinario Wizink Center. Rosalía ha bajado el telón de la gira que ha culminado en un año de súbito fenómeno nacional con Malamente a la primera figura musical que, cantando en español, nominan al Grammy a mejor nuevo artista.

Rosalía reúne a más de 16.000 personas en Madrid

Lo vivido este martes en Madrid fue una cuestión de puro corazón. Las cerca de 16.000 personas congregadas en el Wizink Center latieron con ella.

El de este martes ha sido su cuarto concierto en la región desde que hace poco más de un año empezó a dejar vislumbrar en el recoleto festival Cultura Inquieta.

La mirada de Pedro Almodóvar dio un pequeño empujón a la artista con su revolucionario segundo disco, El mal querer. Distinguido con el Premio Ruido por la prensa musical nacional como el mejor álbum de 2018.

"¡Madrid, buenas noches! ¡Estoy tan agradecida de poder volver aquí para tocar para todos vosotros!", exclamó minutos después de saltar al escenario. Rosalía se mostraba firme, arrebatadora y a golpe de percusión junto a sus seis bailarinas gemelas, sus palmeros y coristas y El Guincho como artesano de estratégicos arreglos digitales.

Si en A palé mostró su faceta de rapera, con Barefoot in the Park dejó paso a su sensibilidad emocional y con Que no salga la luna, a sus orígenes flamencos. Estos salieron a raudales y a capella en su interpretación de Catalina, de su primer álbum, Los ángeles, también distinguido con el Premio Ruido al mejor disco español de 2017.

"Madrid, ¿estáis brillando o no?"

Rosalía inquiere tras ponerle eso mismo a la noche con el tema junto a J Balvin. Después de llevar a miles de asistentes castellanoparlantes a cantar rumba en catalán con Milionària.

No decae el hipnotismo visual y, cuando parecía haber disparado todas sus balas, la cantante se marca una puesta en escena con sus bailarinas bañadas en luz a cuenta de Lo presiento.

Las sorpresas no acaban, con la irrupción inesperada del ídolo puertorriqueño Ozuna para recuperar en vivo su Yo x ti, tú x mí.