27/11/2019 - 16:41
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El vídeo, que circula como la pólvora por WhatsApp, muestra cómo un hombre se coloca en el punto más alto del puente y, después de pensárselo unos segundos, se lanza al vacío hasta acabar en la carretera.
Intenta quitarse la vida desde la Glorieta de San Vicente
Afortunadamente, el joven únicamente ha resultado herido. En el vídeo, grabado con el móvil por uno de los conductores que pasaba por allí en ese momento, podemos observar cómo una ambulancia acude a atender al protagonista de este suceso.
La Policía ha intentado hablar con él pero el hombre no dejaba acercarse a nadie. Por su parte, los Bomberos pararon el tráfico.
El suicidio mata a más de 3.600 personas cada año en España
Más del doble que las fallecidas en accidentes de tráfico. Más de 200 personas además realizan tentativas cada día, lo que supone un impacto en sufrimiento que se puede contabilizar en miles de personas y familias.
La prevención y la disminución de estas cifras, de este sufrimiento, empiezan por reconocer que como sociedad tenemos un problema, y que tenemos que visibilizarlo y hablar de él para poder prevenirlo.
El suicidio es ya la primera causa de muerte externa en muchos países del mundo, de las primeras causas de muerte en adolescentes y personas en edad productiva. En España, es la tercera causa de muerte entre los más jóvenes, de 15 a 29 años.
Cada 40 segundos, una persona se quita la vida en el mundo
Según la OMS, unas 3 mil personas se suicidan al día en el mundo, lo que supone casi un millón al año, o lo que es lo mismo, una persona se quita la vida cada 40 segundos. Lo peor es que va en ascenso, porque en menos de 50 años ha aumentado un 60% y en 2020 se espera que aumente otro 50%.
Por su parte, los datos ofrecidos por el Observatorio del suicidio en España registró 3.679 suicidios en 2017, 10 al día. 3 de cada 4 han sido de varones (2.718) y un 25% mujeres (961).
Mitos e ideas erróneas del suicidio
- Entre los mitos se encuentra la idea de que no se puede prevenir. Esto es posible, pero es necesario la detección temprana y poder disponer de los recursos, profesionales y espacios adecuados.
- Otra creencia errónea es que las personas que se suicidan son egoístas o valientes, cuando la realidad es que la conducta suicida no está vinculada con estas cualidades, sino con un altísimo grado de sufrimiento de la persona.
- Los intentos no son un llamada de atención, sino la manifestación de la desesperación y dolor que siente la persona.
- Tampoco es cierta la idea de que la persona que quiere acabar con su vida no avisa, muchos revelan de alguna manera sus intenciones a su entorno. De cada diez personas que se suicidan, nueve de ellas verbalizaron claramente sus propósitos y la otra dejó entrever sus intenciones de acabar con su vida.
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