El TAC de baja dosis podría prevenir cáncer de pulmón en receptores de trasplante hepático

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08/07/2024 - 10:05
Radiografía de cáncer de pulmón

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La doctora Meylin Caballeros, radióloga de la Clínica Universidad de Navarra, ha argumentado en su tesis doctoral que la Tomografía Axial Computarizada (TAC) de baja dosis puede prevenir el cáncer de pulmón y reducir el riesgo cardiovascular en receptores de trasplante hepático. Su investigación, basada en un estudio con 124 pacientes, revela que la incidencia de cáncer de pulmón es alta entre estos trasplantados, posiblemente debido a la inmunosupresión y otros factores de riesgo, pero puede ser mitigada mediante programas de detección temprana con TAC de baja radiación.

La Clínica Universidad de Navarra informó este pasado lunes que durante el proceso de cribado, liderado por el departamento de Neumología, se puede utilizar el TAC de imagen para identificar factores de riesgo cardiovascular como el calcio coronario.

La tomografía por emisión de positrones para la detección temprana del cáncer de pulmón

Además, la doctora Caballeros ha defendido recientemente su tesis doctoral, donde destaca que la combinación de TAC de baja dosis y tomografía por emisión de positrones (PET) es una herramienta diagnóstica eficaz para la detección temprana del cáncer de pulmón entre estos pacientes. Este enfoque también reduce la necesidad de procedimientos invasivos innecesarios y mejora las opciones de tratamiento curativo en la mayoría de los casos.

La investigación confirmó que los receptores de trasplante hepático tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, y que incluirlos en programas de detección permite encontrar la enfermedad en etapas "potencialmente curables".

Los trasplantados hepáticos

Específicamente, entre los 124 pacientes estudiados de 2007 a 2021, la incidencia del cáncer fue del 9.7 %, significativamente superior al promedio de aproximadamente 1.5 % en la población general. La doctora Caballeros señaló que en el estudio inicial se identificaron 31 nódulos sólidos de al menos 5 milímetros, de los cuales dos resultaron ser cáncer. Durante el seguimiento, se diagnosticaron diez cánceres adicionales.

Además de los pacientes trasplantados hepáticos, la investigación también consideró un grupo de control de 485 fumadores no inmunosuprimidos, emparejados por edad, sexo, historial de consumo de tabaco, presencia de enfisema en los resultados del TAC y estado de tabaquismo al inicio del programa.

El impacto en el riesgo de cáncer y factores cardiovasculares

Según explicó la doctora Caballeros, al comparar estos fumadores con los pacientes trasplantados, se observó que aquellos que fumaban más de 35 paquetes de tabaco al año tenían un mayor riesgo de cáncer de pulmón. Además, una vez diagnosticado el tumor, no se encontraron diferencias significativas en la supervivencia entre ambos grupos, respaldando así la utilidad del cribado en esta población de pacientes.

El estudio también encontró que los receptores de trasplante hepático tienen una prevalencia más alta de factores de riesgo cardiovascular y de calcificaciones coronarias que los fumadores que no están bajo inmunosupresión.

La reducción de la mortalidad

Este cáncer es uno de los más comunes causados por el tabaquismo, tanto en España como en el resto del mundo. Hace más de 20 años, la Clínica Universidad de Navarra introdujo en España el Programa de Detección Precoz del Cáncer de Pulmón para abordar esta epidemia de salud pública. Este programa ha contribuido a reducir la mortalidad y mejorar la supervivencia frente a la alta incidencia de este tipo de cáncer.

Desde su inicio, el programa de detección ha consistido en realizar un TAC anual con baja dosis para evaluar el tejido pulmonar en busca de nódulos y detectar tumores en etapas iniciales de desarrollo. Hasta ahora, el 85 % de los cánceres de pulmón detectados en este programa se encuentran en el estadio más temprano, donde típicamente son curables mediante cirugía.

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