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El avance de los contagios por coronavirus en España está llevando a las autoridades a tomar medidas de contención nunca antes vistas. Entre ellas, con el fin de frenar la expansión del virus, el Gobierno de la Comunidad de Madrid ya ha aconsejado a las empresas fomentar el teletrabajo, es decir, que los empleados trabajen desde casa.
En la misma línea, los colegios de Madrid y País Vasco cerrarán sus puertas esta semana como medida de choque. Esto deja a millones de alumnos de colegios, institutos y universidades en sus casas. A todo esto, hay padres y madres que no tienen posibilidad de teletrabajar, y tampoco tienen con quién dejar a sus hijos.
En cambio, las familias que tienen más suerte podrán seguir realizando su jornada laboral desde casa, haciéndose cargo también de sus hijos mientras siguen sin clases.
Las empresas dejan a sus empleados trabajar desde casa
El teletrabajo es una posibilidad que ofrecen cada vez más empresas a sus trabajadores. Con este método, las organizaciones más desarrolladas y con posibilidad de trabajar desde casa, implementan un modo de trabajo más flexible.
Si bien es cierto que el teletrabajo aún no está muy implantando en España, la situación es diferente en otros países de nuestro entorno europeo. Es por esto por lo que ahora lo estamos viviendo en España como algo extraodinario, porque de hecho lo es.
La realidad es que las empresas están adaptando su metodología de trabajo diario a las circunstancias por el avance del número de contagiados.
España, por debajo de la media europea en teletrabajo
De acuerdo con los datos de Eurostat, el 14% de los empleados en Países Bajos trabajan desde casa, en Finlandia el 13,3% y en Austria el 10%. Por su contra, en España solo teletrabaja el 4,3% de los empleados, y se queda un punto por debajo de la media europea.
Si lo ponemos en contexto, es cierto que no todos los sectores permiten este modelo organizativo, aunque es fácil de implantar en aquellos puestos que basan en presencia en oficinas.
Hemos hablado con varias personas que teletrabajan desde hace años para que aconsejen a aquellos que no suelen trabajar desde casa. Estas son sus recomendaciones.
¿Cómo hacer un teletrabajo eficiente?
Uno de los consejos es no perder de vista que aunque estemos trabajando en casa, estamos en horario laboral. Esto quiere decir que no es el momento de poner una lavadora, ni de sacar los platos del lavavajillas, como tampoco hacer la comida mientras trabajamos.
De hecho, si entramos en esta dinámica no estaremos rindiendo en nuestro trabajo y pronto lo verán los jefes. Y es que una de las razones por las que el teletrabajo no está muy impulsado en España podría ser esta.
Aún hay mucha desconfianza por parte de los responsables en las grandes empresas a permitir a sus empleados trabajar un día desde casa. Son muy pocas las empresas que lo hacen aún teniendo las herramientas suficientes.
Ventajas de trabajar desde casa
Una de las primeras ventajas es la posibilidad de mejorar la conciliación familiar. En este sentido, lo mejor es intentar que tus horarios de trabajo coincidan con los horarios en los que no hay nadie en casa.
Y es que si tenemos a los niños en casa o a nuestra pareja, es fácil perder la concentración. Pero del mismo modo, esto también puede ocurrir en la oficina cuando tus compañeros empiezan a sacar conversación.
En resumen, dependiendo de la persona habrá quien sea capaz de concentrarse más en casa que en el trabajo y viceversa. No obstante, quédense con algo importante, y es que hay que tratar de evitar las distracciones de cualquier tipo.
Porque al fin y al cabo si tus jefes ven que el trabajo se cumple con normalidad podrían extender su aplicación como pasa en otros países europeos.
Cómo medir el teletrabajo
Normalmente, los empleados que realizan la mayor parte de su trabajo por teléfono son los grandes candidatos a optar por la modalidad del teletrabajo. Siempre pueden reencaminar las llamadas y abaratar la telefonía móvil para facilitar dicha actividad laboral.
Existen perfiles propensos para hacer este tipo de modalidad de trabajo. Por ejemplo periodistas, escritores, abogados, ingenieros o profesiones de autónomos. Por otro lado, están los empleados de telemarketing, que pueden acceder a la información a través de una pantalla de su ordenador.
Otros profesionales como analistas o programadores informáticos, que también realizan su actividad desde el domicilio, son perfiles que se ajustan.
Para valorar el rendimiento de una experiencia de teletrabajo se debe comenzar por medir la actividad en su totalidad. Este indicador empresarial mide el tiempo que pasa desde que la persona comienza a trabajar hasta que esta finaliza su jornada laboral. El horario es un parámetro invariable. La diferencia entre horario laboral y actividad son las pausas que hace la persona.
Para controlar el teletrabajo existen varios programas pero lo primero que debe establecerse es una serie de objetivos cuantificables y un timming. El trabajador deberá gestionar su tiempo de trabajo cumpliendo los objetivos de manera adecuada.
La empresa debería facilitar ordenadores, móvil y acceso a Internet para que los empleados puedan trabajar desde casa como si estuvieran en la oficina.
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