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Madrid, 26 feb (EFE).- El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha considerado que la aprobación del decreto ley que derogará parte de la reforma laboral de 2012 "se va a alargar un poquito", porque el Gobierno aún no tiene garantizados los apoyos para que sea convalidado por la Diputación Permanente del Congreso.
En declaraciones a los medios este martes tras participar en la presentación del futuro Consejo de Desarrollo Sostenible, Álvarez ha asegurado que los partidos políticos están teniendo una actitud constructiva y ha apuntado en concreto a Podemos y PDeCAT "por poner dos posiciones que estarían en los extremos".
Álvarez ha explicado que la negociación social y política está en la fase de ver si en el decreto ley entran los tres aspectos contemplados inicialmente, que son la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa, la ultraactividad de los convenios (vigencia indefinida mientras no se negocie otro) y el establecimiento de un control horario.
Por otra parte, ha insistido en que hay que derogar también la reforma de pensiones de 2013, una vez que el Gobierno se ha saltado la norma para poder garantizar las pensiones con el IPC en 2018 y en 2019, y después de que se haya retrasado la entrada en vigor del factor de sostenibilidad de 2019 a 2023.
"Ha llegado la hora de quitarnos de encima este peso, porque hay gente que se jubila anticipadamente porque tiene miedo de lo que pasará cuando el factor de sostenibilidad esté en marcha", ha explicado en referencia a este instrumento que servirá para ajustar la pensión inicial a la baja en función de la esperanza de vida.
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