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Valery Salov, el tercer mejor jugador del mundo de ajedrez de la década de los 90 tras Karpov y Kasparov, está impartiendo un curso en San Lorenzo de El Escorial desde ayer hasta el próximo jueves a un grupo de ajedrecistas ciegos o con discapacidad visual.
A estas charlas asistirán miembros de la Federación Española de Deportes Ciegos (FEDC): Eduardo Méndez, Pedro José Rubio, Enrique López, Albert Olivera, Gavril Draghici y José Manuel Vela.
¿En qué consistirán estas clases?
En estas clases se analizará la trayectoria de Mijail Botvinnik, que fue campeón del mundo entre 1948-63, en los cuáles fue uno de los grandes representantes de la Unión Soviética (URSS).
Los asistentes podrán mejorar su nivel de juego a través de nuevas técnicas de este deporte. Por las mañanas, las sesiones se dedicarán al estudio del campeón soviético y en las sesiones que tienen lugar por la tarde se repartirán entre el estudio y resolución de problemas y el análisis de algunas partidas de actualidad.
El ajedrez se define como un deporte integrador
Es un deporte con larga tradición de jugadores ciegos o con deficiencia visual debido a que son capaces de competir integrados en competiciones contra personas videntes. Los jugadores con deficiencia visual tienen algunas adaptaciones dentro de las competiciones. Una de ellas, es que, los cuadros negros son diferentes al tacto con respecto a los cuadros blancos. Los oscuros son más altos que los blancos.
Las piezas negras llevan una plataforma que las distingue perfectamente de las blancas. Cada casilla tiene un agujero en el que se encajan las piezas por la parte inferior. Las partidas entre ajedrecistas ciegos se juegan en dos tableros, ya que cada uno de los jugadores mueve las piezas en su tablero de modo que, al tocarlas, no moleste ni sea molestado por su contrario. Los relojes de ajedrez disponen de un mecanismo de voz con auriculares para acceder al tiempo de juego.
Beneficios del ajedrez en la población
El deporte de estrategia ayuda a prevenir el Alzheimer. El ajedrez ayuda a recordar los movimientos y visualizar las estrategias previas, como movimientos del contrincante o los posibles contraataques frente a ello.
El estudio de la revista especializada New England Journal Medicine ha concluido que “la práctica del ajedrez ayuda a prevenir o al menos retrasar la aparición de síntomas del Alzheimer, la demencia y otros problemas cognitivos relacionados con el envejecimiento”. Parte de este estudio ha sido probado en población mayor de 75 años. Realizar este tipo de ejercicios durante diez minutos previene la aparición del Alzheimer.
El ajedrez entretiene y mejora el estado de ánimo. Permite interactuar con personas de cualquier edad y se puede jugar a distancia en numerosas plataformas y sin ningún tipo de coste. Sirve para mejorar la comprensión y la capacidad en situaciones difíciles. También mejora el estado de ánimo de personas que se encargan de cuidar de enfermos terminales de cáncer y otro tipo de enfermedades.
Los más pequeños de la casa aprenden a tomar conciencia de la importancia de sus actos. Los ayuda a aceptar las reglas y asumir las consecuencias de sus propios actos. Se trata de un juego en el que no interviene el azar: todas las piezas están siempre a la vista. Según ha declarado el presidente de la Academia Armenia de Ajedrez: "La cualidad más importante del ajedrez es que es un juego justo, por lo cual los niños pequeños comienzan a aprender un juego que es limpio y honorable, y eso les enseña a tener un buen comportamiento". En este país, es una asignatura obligatoria durante la primera etapa estudiantil desde 2011.
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