Vender una vivienda de protección oficial en España es un proceso más complejo que la venta de una vivienda convencional debido a las restricciones legales que las regulan.
Muchas veces no se trata solo de saber vender. Hay que ofrecer una buena experiencia al cliente de forma que sepa que puede contar con la empresa en todo momento y puede enriquecer sus expectativas y cubrir sus necesidades.