Villar multado por el trasiego de votos para Qatar 2022

La detención que fue llevada acabo durante el día de ayer con Platini, no es una buena noticia para, la que entonces era, su mano derecha.

Aunque Platini ya ha sido puesto en libertad tras pasar 15 horas siendo interrogado por una presunta corrupción en la atribución del Mundial 2022 a Qatar y la organización de la Euro del 2016 en Francia, para Ángel María Villar, no se descarta que el escándalo vuelva a salpicarle.

El francés tendrá que volver a dar explicaciones, y el español se enfrenta en España a grandes acusaciones por administración desleal, apropiación indebida, estafa, falsedad documental y corrupción entre particulares.

El juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, llegó a meterlo en prisión preventiva y ya tiene muy avanzada la fase de instrucción que puede llevar pronto a Villar y al resto de su cúpula a sentarse en el banquillo.

Haciendo amigos, y ganando votos...

Supuestamente, Ángel María Villar, se encargaba de recolectar votos para Qatar 2022 entre sus amigos iberoamericanos y, a cambio, la candidatura de España y Portugal para el Mundial 2018 recibía el respaldo de los países árabes.

Al principio todo salió a las mil maravillas, pero el poder económico y las infuencias rusas, frustaron los planes de Villar a favor de Vladimir Putin.

El pacto parece que existió, pues según el entonces mayor directivo de la FIFA, no fue un acuerdo firmado, pero si que existen evidencias que señala que hubo algún tipo de coalición.

Así lo informa Blatter, él cual posee buena información, a la par que se encuentra dolido con Villar. Pues, el español, no solo parece haber "traficado" con votos, sino que también podría haber roto un pacto anterior en el que figuraba Estados Unidos como organizador en 2022 en lugar del Emirato.

El poder te absuelve de dar explicaciones

A pesar de que Ángel María Villar fue llamado a declarar ante el instructor del comité ético, Michael García, el eterno presidente de la Federación y por entonces, vicepresidente de la UEFA y de la FIFA, consideró que su poder le eximia de dar cualquier declaración.

Y no sólo se negó a declarar, sino que también le preguntó al instructor del comité ético quién había iniciado el procedimiento y en virtud de qué hechos debía de testificar.

Michael García, obviamente no contestó, y Villar saltó con el ya famoso "¡manda cojones!". Además, intentó recusar al ex fiscal por entender que no era imparcial por su nacionalidad norteamericana,y la recusación no salió adelante.

A pesar de todas sus quejas, Villar acabó declarando. Pero entonces, ya fue tarde para sortear la multa por su exabrupto y por la negativa a colaborar.

Y aunque García intento probar que Villar había estado "traficando" con los votos, no pudo verificarlo. A lo que Blatter contestó, que este tipo de de pactos entre bloques de países, forman parte de las negociaciones geopolíticas que preceden a cualquier concesión Mundial, y más cuando hay una votación doble y a una de ellas optaba la Federación Española.