Los programas de rehabilitación logran reeducar solo al 7 % de los agresores de violencia de género

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21/01/2025 - 18:30
Programas de rehabilitación en agresores

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La educación juega un papel fundamental en la lucha contra la violencia de género, y por ello existen programas de reeducación como el Programa Contexto de la Universidad de Valencia, dirigido a hombres sin antecedentes y condenados a penas menores de dos años.

¿Programas de reeducación para vencer la violencia de género?

La violencia de género sigue siendo un problema grave en nuestra sociedad, y uno de los aspectos clave para combatirla es la educación. Es esencial promover desde temprana edad valores de respeto e igualdad, y erradicar actitudes machistas.

Además, la reeducación de los agresores juega un papel fundamental en la prevención de la violencia. A través de programas de rehabilitación, los hombres tienen la oportunidad de reflexionar sobre el daño que han causado a sus parejas y a sus familias, reconociendo la gravedad de sus acciones.

Estos programas les enseñan a gestionar sus emociones, especialmente la ira, y a desarrollar habilidades para resolver conflictos de manera pacífica y respetuosa. El objetivo no es solo evitar la reincidencia, sino también cambiar comportamientos profundamente arraigados que suelen provenir de patrones aprendidos en la infancia. La reeducación ofrece una oportunidad de cambio real, ayudando a los agresores a comprender que la violencia nunca es una solución.

La lucha contra la violencia de género requiere el compromiso de toda la sociedad, involucrando a instituciones, familias y comunidades para construir un entorno más justo e igualitario.

En este sentido, programas como el Programa Contexto, de la Universidad de Valencia, juegan un papel fundamental dentro de la violencia de género. Este curso está destinado a hombres sin antecedentes penales y que hayan sido condenados a penas de menos de dos años.

Su objetivo es proporcionar una oportunidad de cambio, ayudando a los participantes a identificar y gestionar sus emociones, así como a controlar los impulsos violentos. Por supuesto, la principal misión es reducir los casos de violencia de género y asegurar a la mujer un espacio seguro.

Una terapia enfocada en el agresor

La terapia se enfoca en el agresor, promoviendo un proceso de reflexión y autocrítica. Este tipo de programas es una herramienta esencial para romper el ciclo de la violencia de género y ofrecer una posibilidad real de transformación para aquellos que están dispuestos a cambiar su comportamiento.

Sin embargo, el proceso de reeducación requiere tiempo, esfuerzo y un compromiso verdadero de parte de los agresores para reconocer sus errores y corregirlos.

Marisol Lila, catedrática de Psicología Social y directora del Programa Contexto, explica que los hombres que llegan a este tipo de programas suelen mostrar una actitud de resistencia. "Ellos creen que, si no hay violencia física, como un puñetazo, las otras conductas no son violentas", detalla.

Un programa que ha atendido a más de 1.500 hombres

Desde 2006, el programa ha atendido a más de 1.500 hombres acusados de maltrato, enfocados en enseñarles a gestionar su ira y desarrollar herramientas para controlar sus impulsos. Elena Terreros, doctora en Psicología y subdirectora del programa, destaca que solo el 7 % de los participantes reincide después de la terapia.

El objetivo de este enfoque es claro: trabajar directamente con el agresor. "Si no intervenimos con el delincuente, esa violencia persiste", concluye Marisol Lila. La clave es enseñar a no recurrir a la violencia, evitando así que futuras víctimas sufran.

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