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La disputa entre los taxis y los vehículos de transporte con conductor (VTC) continúa a pesar de una sentencia europea que abordó el caso específico de Barcelona.
La sentencia declaró desproporcionada la restricción de licencias para los VTC en relación a los taxis, pero dejó abierta la posibilidad de establecer otros números si el interés general lo justifica.
La patronal de los VTC celebra la decisión y critica las regulaciones regionales que consideran contrarias al derecho español y europeo
Consideran que la sentencia cuestiona las restricciones impuestas en otras regiones, como Aragón, Baleares o Valencia.
Sin embargo, los taxistas en Barcelona convocan una movilización para exigir limitaciones en las autorizaciones de licencias de VTC en vías interurbanas. Consideran que la sentencia sí permite limitar el negocio de los VTC para proteger el medio ambiente y evitar la congestión del tráfico.
La Asociación Nacional del Taxi (Antaxi) pide a las autoridades que regulen las normativas para lograr una movilidad urbana equilibrada, cumpliendo con las excepciones establecidas por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
El sector del taxi ha expresado preocupación por la posible irrupción masiva de autorizaciones VTC debido a la interpretación de la sentencia. Actualmente, hay 60.039 taxis y 18.389 licencias de VTC en España, lo que representa una proporción de un VTC por cada 3,3 taxis.
¿Igual que el taxi?
Los vehículos VTC (Vehículo de Transporte con Conductor) son automóviles utilizados para ofrecer servicios de transporte de pasajeros con conductor. A diferencia de los taxis convencionales, estos vehículos no pueden ser contratados directamente en la calle, sino que requieren una reserva previa a través de una plataforma o empresa autorizada.
Estos vehículos suelen ser de gama alta y ofrecen un servicio más exclusivo y personalizado. Sus conductores deben cumplir con ciertos requisitos y obtener una licencia específica para poder operar legalmente.
En muchos países, el sector de los VTC ha generado controversia y conflicto con los taxistas tradicionales, ya que se percibe como una competencia desleal debido a las diferencias en las regulaciones y requisitos para operar. Esta disputa ha llevado a debates y litigios legales en varios lugares.
La convivencia entre los taxis y los VTC ha sido complicada en los últimos años, generando numerosas protestas en todo el país
El conflicto comenzó en 2009 con la eliminación de las limitaciones al transporte privado, lo que permitió la entrada de empresas como Uber y Cabify. Aunque se impuso el ratio de 1/30 en 2015, el Tribunal Supremo declaró legales las licencias de VTC concedidas hasta entonces.
La regulación de los VTC varía en cada región, pero generalmente prohíbe que circulen en busca de clientes y no establece precios regulados, lo que provoca fluctuaciones según la oferta y la demanda. La convivencia entre ambos sectores sigue siendo un desafío en España.
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