El abastecimiento de agua en algunas zonas de Castilla y León no es apta para el consumo humano

En Castilla y León, 118 zonas de abastecimiento de agua no son aptas para el consumo humano, y además presentan riesgos para la salud, y se estima que esas zonas alcanzan en realidad las 1.083.

Así lo refleja el informe titulado 'Calidad de las aguas de consumo humano' de la Junta de Castilla y León del 2019, y que abarca el período de 2018 a 2021.

En él, las incidencias más destacadas de esas zonas con riesgos para la salud, 23 se encuentran en Ávila, 22 en Soria, 15 en Salamanca y 14 en León o Segovia.

En cuanto a las zonas de abastecimiento simplemente no aptas para el consumo, a la cabeza se encuentra Ávila con 239, seguida por Segovia con 159, Salamanca con 155 y León con 118.

En el abastecimiento de agua, la ‘no conformidad’ se refiere a aguas que están fuera de algún parámetro por exceso o por efecto, pero son potables

De las 48.085 zonas de abastecimiento de agua de la Comunidad Autónoma, 41.882 son aptas para el consumo, mientras que 3.057 lo son pero señaladas con la 'no conformidad'.

El informe subraya que el 87,1% de los boletines analíticos pusieron de manifiesto que la calificación del agua era la de apta para el consumo mientras que tan solo el 0,2% entrañaban riesgo para la salud.

El citado informe se nutre de datos de la Consejería de Sanidad y del SINAC (Sistema de Información Nacional de Aguas de Consumo), dependiente del Ministerio de Sanidad.

Los objetivos de este estudio son ofrecer las siguientes informaciones:

• Ofrecer información sobre las zonas de abastecimiento de agua de consumo humano de Castilla y León.
• Sobre sus infraestructuras y la calidad sanitaria de las aguas abastecidas.
• Conseguir un control y vigilancia eficiente de las aguas de consumo humano, para evitar o reducir al máximo los posibles riesgos para la salud humana como consecuencia de las posibles contaminaciones de las aguas

El informe pretende mostrar a las personas e instituciones interesadas en ello, como los ciudadanos, los ayuntamientos, los gestores u otras administraciones sobre el estado de las aguas.

Y además pretenden ir informando a la población con respecto al cumplimiento de los objetivos del III Plan de Salud de Castilla y León.

Las zonas de abastecimiento, sus infraestructuras y los puntos de muestreo deben ser registradas en el SINAC

El número total de zonas de abastecimiento de agua de consumo humano en la Comunidad, registradas en el SINAC a 31 de diciembre de 2019 fue de 1.945.

Las infraestructuras son de cuatro tipos:

• Captaciones.
• Estaciones de tratamiento o similares.
• Depósitos
• Redes de distribución.

En la Comunidad existen 21.929 infraestructuras, de las que 6.554 están destinadas a la captación de agua, 4.788 son estaciones de tratamiento, 5.786 depósitos y 4.801 redes de distribución.

El informe sobre el estado del abastecimiento de agua gira en torno a cinco ejes:

• Análisis de control: información sobre la calidad del agua (sabor, textura, olor y color)
• Análisis completo: información sobre todos los parámetros de los criterios sanitarios.
• El control del grifo: comprobación de la calidad en la red domiciliaria.
• Vigilancia sanitaria.
• Control de desinfección y agua de captación.

Según la Junta de Castilla y León, la adopción de medidas correctoras por incumplimientos en la desinfección del agua de consumo fue adecuada.

Respecto a las aguas 'brutas' de las captaciones subterráneas de Castilla y León, la Junta también analiza la existencia de contaminantes superiores, como el hierro, el arsénico, fluoruros, cloruros, sulfatos, sodio, manganeso, cadmio, cobre, cromo, plomo, aluminio, calcio, magnesio, potasio o vanadio.

Solo un tratamiento puede eliminar o disminuir la concentración de estos contaminantes. Por provincias, León, Soria y Ávila son donde se han realizado el mayor número de análisis en captaciones.

El análisis sobre el estado de las zonas de abastecimiento de agua, también revisa la radiactividad en las captaciones, que son analizadas en el laboratorio de Salud Pública de Burgos.

El agua es un seguro para la salud

Debido a desastres naturales como terremotos, inundaciones y tifones o a conflictos armados o guerras, se producen situaciones de emergencia en las que el problema de la escasez de agua o la inexistencia de agua potable puede suponer un agravamiento de la situación debido a la propagación de enfermedades.

El abastecimiento de agua potable supone la perforación de pozos o la búsqueda de otras fuentes, el almacenamiento y tratamiento y la distribución por red o por bombas manuales.

Debemos facilitar productos para mejorar la higiene puede evitar contagios de enfermedades infecciosas, por lo que la educación para la salud y el impulso de buenas prácticas de higiene es fundamental.