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Un 16% de las escuelas en Guatemala no cuentan con acceso al agua, y otro 12% no tiene ni siquiera instalaciones para realizar el lavado de manos, y desgraciadamente, esto es algo que viene sucediendo desde antes de la pandemia.
Todos sabemos que la reapertura de las escuelas ha tenido que hacerse de manera gradual, para garantizar la seguridad de profesores y alumnos.
Y somos conscientes de que realizar el lavado de manos con jabón, resulta eficaz para frenar la pandemia y combatir otros virus y bacterias.
La cuestión es que parece que no somos conscientes de que para millones de niñas y niños en el mundo algo tan sencillo como lavarse la manos, es altamente complicado o directamente imposible de hacer.
Que las escuelas del mundo tengan acceso al agua garantiza que el virus no pueda seguir extendiéndose
Además, cabe destacar que el acceso al agua, jabón e instalaciones para realizar el lavado de manos en las escuelas permite a los niños encontrarse en un entorno favorable, para estudiar y desarrollarse.
Por otro lado, esto tiene que ir acompañado de información adecuada sobre las prácticas de higiene, para que los estudiantes sepan cómo proteger su salud, y lo puedan compartir con sus familias y comunidades, dando lugar a un efecto en cadena que puede ayudar a salvar vidas.
Es por ello que Unicef se encuentra trabajando junto a las autoridades educativas de la región de Guatemala para conseguir un regreso gradual y seguro a las aulas.
La ONG, que cuenta con el apoyo y la contribución global de Orbia en respuesta al COVID-19, está mejorando las redes de abastecimiento de agua en Guatemala y la instalación de estaciones de lavado de manos sustentables en áreas vulnerables de Brasil, Colombia, Ecuador, India, México, Perú y Sudáfrica.
La mejora para contar con acceso al agua y con instalaciones de saneamiento en las escuelas provoca un impacto positivo en la asistencia de niñas a la escuela, pues muchas abandonan temprano los centros educativos porque no cuentan con baños o porque no los tienen diferenciados para chicos y chicas.
Es de vital importancia asegurar que niñas y niños y adolescentes cuentan con acceso al agua en los centros, y que cuentan con las instalaciones pertinentes para poder lavarse las manos.
Este objetivo se enmarca dentro de los ODS de la ONU, que muestra que es posible unir esfuerzos entre gobiernos y autoridades educativas para llegar a las escuelas más lejanas, aisladas y pobres.
La alianza con Orbia demuestra el potencial del sector empresarial al respecto de realizar una aceleración del progreso de los resultados del programa de Unicef
La experiencia de este sector privado y su influencia son importantes para poder cambiar la vida de miles de niñas y niños. Uniendo productos, servicios, investigación y alcance de mercado con las necesidades de estos colectivos.
Apostar por soluciones sustentables y fuertes, pensadas para el largo plazo y que tengan pensando reducir lo máximo posible el daño medioambiental, es clave.
Con la acción de Unicef, escuelas de distintas regiones guatemaltecas contarán con medidas e instalaciones donde realizar la higiene de manos.
Pero el acceso al agua aún es impensable para otros 138 millones de estudiantes de América Latina y el Caribe. Es por ello vital apoyar, colaborar y contribuir desde el sector privado para que todos estos jóvenes cuenten con agua y jabón en sus escuelas. Porque esta forma tan sencilla de higiene, protege y salva vidas.
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