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El ahorro energético se ha convertido en la prioridad de muchas familias. Las constantes olas de calor que estamos sufriendo durante este verano hacen difícil para muchos hogares conciliar una factura de la luz asequible con el uso del aire acondicionado para aclimatar la estancia, pues no cabe duda de que este es uno de los veranos más calurosos hasta la fecha, si bien muchos expertos indican que se trata de uno de los menos calurosos que nos esperan durante los próximos años.
La indiscriminada subida de la luz llevada a cabo durante el año 2021 ha desprotegido a muchos hogares frente a las elevadas temperaturas a las que nos enfrentamos desde hace semanas, y es por eso por lo que muchos usuarios buscan formas alternativas de ahorrar energía sin tener que renunciar a la necesidad del aire acondicionado, que hoy por hoy es imprescindible para poder sobrellevar el calor durante prácticamente la totalidad del día.
Empresas como Tsclima, firma especializada en la instalación de sistemas de climatización y aires acondicionados de todo tipo, tienen como objetivo alcanzar la máxima eficiencia energética posible. Como comentábamos, compaginar el uso del aire acondicionado, aun siendo este moderado, con las temperaturas tan elevadas que estamos viviendo parece imposible debido a múltiples factores, pero nos hemos puesto en contacto con Tsclima para comprender que es posible ahorrar energía sin renunciar a lo que, hoy por hoy, es la única vía para sobrellevar el calor: el aire acondicionado.
¿Se puede ahorrar energía con el aire acondicionado?
Durante los meses de verano el uso del aire acondicionado, como es natural, se dispara. Al tratarse de un dispositivo más sumado a los elementos que ya utilizamos es normal que la factura de la luz vea reflejado un aumento considerable, sobre todo porque en las épocas de mayor calor o cuando más tiempo pasamos en casa el aire acondicionado está encendido durante varias horas. Conseguir un ahorro energético sin renunciar al aire acondicionado no depende en exclusiva del uso que se haga de este, sino que son muchos otros factores los que están implicados.
Sin ir más lejos, es preciso que el aislamiento de nuestra vivienda sea óptimo. No siempre podemos controlar la calidad del aislamiento de nuestro hogar, pero siempre que exista la posibilidad de mejorarlo debemos tratar de hacerlo, pues este acto tiene un impacto directo en el uso del aire acondicionado y, consecuentemente, en la factura de la luz. Esto se debe a que una vivienda con un mejor aislamiento impedirá que el calor afecte tanto al hogar, y lo que es más importante, garantizará que la temperatura del aire acondicionado, en primer lugar, se alcance antes, y en segundo lugar, se mantenga durante más tiempo.
Además de esto, programar adecuadamente el aire acondicionado puede suponer también un ahorro considerable. Muchas personas dejan el aire acondicionado durante horas bajo la creencia de que es la única forma de mantener la temperatura de forma óptima, y en algunos casos, inclusive, optan por dejarlo encendido durante todo el día, incluso cuando están fuera de casa, para garantizar que al volver a ella la estancia tendrá una temperatura óptima.
Esto supone un problema por varios motivos: tener el aire acondicionado durante tantas horas no es necesario y claramente se verá reflejado en la factura; no tenemos pleno control sobre el uso que hacemos del aire acondicionado cuando no estamos en casa, y en muchas ocasiones la estancia adquiere una temperatura muy por debajo del mínimo recomendado. Esto último hace referencia a que se recomienda que el interior esté a no más de 12 grados por debajo de la temperatura exterior, y no atender a esto puede tener efectos tanto en nuestro bolsillo como en nuestro planeta. Programar el aire acondicionado es especialmente útil durante las horas de sueño, en las que no es necesario dormir con el aire acondicionado pero tal vez sí para conciliar el sueño. Además, la mayoría de aparatos cuentan actualmente con el modo Eco, que puede contribuir a que el consumo se reduzca hasta un 30%.
En lo que respecta propiamente al aire acondicionado, sí hay una serie de aspectos que debemos tener en cuenta para asegurarnos de ahorrar sin renunciar a él. En primer lugar, y según nos indican desde Tsclima, es preciso tener presente las necesidades y capacidades de nuestro hogar para optar por un dispositivo u otro, pues dependiendo de las dimensiones y de nuestra familia puede que sea mejor un tipo de aire acondicionado, como el sistema split, u otro, como el aire acondicionado por conductos. Puedes consultar todos los sistemas de climatización ofrecidos por la firma en su página web https://tsclima.com/aire-acondicionado-valencia/. Asimismo, buscar que la etiqueta de eficiencia energética sea la A+++ o similares, pues cuanto mejor sea la calificación mayor será el ahorro de energía. Eso sí, hay que tener en cuenta que esta calificación va muy ligada al presupuesto, pues los aparatos con una calificación energética mejor cuentan con precios más elevados.
A qué temperatura poner el aire acondicionado en verano
El uso que hacemos del aire acondicionado, como es natural, también incide notoriamente en el ahorro que podemos extraer de él. Además de no mantenerlo encendido durante tantas horas, tal como comentábamos anteriormente, también debemos consultar cuál es la temperatura ideal a la que debemos poner el aire acondicionado, sobre todo en las épocas de temperaturas más altas como están siendo estas olas de calor. Según indican los expertos, tales como el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE) o la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la temperatura ideal para poner el aire acondicionado durante los meses de verano oscila entre los 23 y los 26 grados. Así lo respalda también el portal TodoHogar.wiki, tras un estudio previo para determinar a qué temperatura se ha de poner el aire acondicionado para ahorrar.
No obstante, no debemos fijarnos exclusivamente en el ahorro energético. Las olas de calor pueden hacernos pensar que debemos poner el aire acondicionado a temperaturas inferiores a las que estamos acostumbrados a fin de combatir las temperaturas tan elevadas del exterior, pero nada más lejos de la realidad. Debemos tener presente que el objetivo del aire acondicionado no es que los interiores tengan una temperatura refrescante sino confortable, y para determinar esta medida debemos prestar atención a la temperatura exterior. La mayor parte de los días debemos intercalar interiores con exteriores, ya sea por trabajo, visitas de ocio o salidas y entradas a nuestro hogar por recados, y sufrir cambios de temperatura tan bruscos al pasar de una estancia muy fresca a un exterior muy caluroso puede jugarnos una mala pasada a nivel de salud.
Así pues, es preciso contar con varios factores a la hora de determinar a qué temperatura poner el aire acondicionado en verano, si bien la media radica entre los 23 y los 26, preferiblemente los 24.
Sobre la empresa de climatización Tsclima
Tsclima es una empresa de climatización y energías renovables valenciana cuya trayectoria comenzó en 2002, habiendo alcanzado este mismo año las dos décadas de experiencia en el sector. Están especializados en la instalación de sistemas de climatización y aires acondicionados tanto en hogares particulares como en espacios semi-industriales, garantizando también servicios de zonificación y de mantenimiento de sistemas. Su principal objetivo es alcanzar y ayudar a alcanzar la máxima eficiencia energética, motivo por el cual trabajan con las últimas tecnologías del sector y ofrecen servicios de asesoramiento a todos sus clientes a fin de hacer un uso responsable de sus productos y conseguir un ahorro energético mayor y coherente.
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